El futuro alcalde de Carcaixent, Paco Salom, anunció ayer su intención de establecer una ronda de contactos con todas las formaciones que han logrado representación en el ayuntamiento. Su objetivo es prolongar, ahora en el Gobierno, la política que, asegura, practicó en la oposición. «Nosotros nos ofrecimos a Lola Botella para ayudar, por eso mi predisposición es la misma, quien venga a sumar bienvenido, queremos una legislatura tranquila y a quien pueda aportar, encantado porque nuestra intención es abrir la gestión a todos los partidos», señala Salom.
Durante la campaña, Salom aseguró que será implacable con las ilegalidades y se comprometió a realizar un buen uso de los recursos públicos, ya que Compromís siempre ha criticado el «despilfarro» que han supuesto para Carcaixent proyectos como la Católica o el derribo del edificio de Correos. Asegura que Carcaixent tiene recursos «muy valiosos» que bien gestionados pueden generar una importante actividad económica. c. alós alzira
