La Comisión Nacional de Garantías de Ciudadanos ha resuelto en apenas tres días la expulsión del nuevo alcalde de Turís, Ismael Corell, al considerar que «ha utilizado al partido para sus intereses personales», en este caso negociar la alcaldía mediante un pacto que incluye además a Compromís. Corell, que ayer aseguró que desconocía cualquier resolución del partido en este sentido, anunció su intención de recurrir cualquier sanción al considerar que no ha incumplido ninguna directriz. El alcalde llegó a comentar que no considera a Compromís un partido nacionalista y, por otra parte, defendió que él había cerrado a un acuerdo con el PSOE, que era el grupo mayoritario que permitía configurar una mayoría alternativa al PP. Los socialistas cuentan con cinco concejales por uno de Compromís, mientras que el PP tiene otros seis escaños en la nueva corporación. El único concejal de Ciudadanos tenía de este modo la llave del nuevo gobierno y se decantó la víspera del pleno de investidura por el tripartito a través de un acuerdo que le permitirá ostentar la alcaldía seis meses.
Fuentes de Ciudadanos confirmaron ayer que la dirección en Valencia elevó el mismo sábado, tras constituirse los ayuntamientos y confirmarse los diferentes pactos, la propuesta de apertura de un expediente sancionador, que la Comisión Nacional de Garantías resolvió el martes por la noche decretando la expulsión de Ismael Corell. El partido ya había alertado de que no aceptaba los pactos con Compromís por su condición de partido nacionalista y que, en el caso de Corell, también se había saltado las líneas rojas del partido al negociar un cargo como la alcaldía cuando se trata del único concejal de Ciudadanos.
Infracción muy grave
Un portavoz del partido señaló que los estatutos contemplan como infracción muy grave el incumplimiento de los acuerdos de los órganos de dirección, por lo que se ha decretado su expulsión, si bien una vez se le comunique la decisión dispondrá de un plazo de siete días para defenderse.
Ismael Corell aseguró ayer no tener constancia de esta sanción, defendió que las normas que recibió por escrito no prohíben la posibilidad de negociar con otras fuerzas políticas, por lo que entiende que no ha desobedecido ninguna directriz del partido, y también dejó claro que no tiene intención de renunciar al acta de concejal sea cual sea la respuesta a sus alegaciones.
