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El mando del organismo de las basuras seguirá en Guadassuar

La presidencia del Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna ha estado vinculada desde la constitución del ente a Guadassuar, donde se ubica la planta de basuras y han empezado a construirse las nuevas infraestructuras de tratamiento, y seguirá allí aunque, al igual que el ayuntamiento de la localidad, cambiará de manos.

La asamblea de Compromís aprobó el domingo que el nuevo alcalde de Guadassuar, Salvador Montañana, asuma la presidencia del consorcio en base al acuerdo alcanzado con el PSPV y, del mismo modo que ha sucedido en el ayuntamiento, tomará el relevo del popular José Ribera. Montañana coge las riendas de un organismo que adjudicó cinco días antes de las elecciones un proyecto de construcción y explotación durante veinte años de una nueva planta de tratamiento por un importe de 86 millones de euros. La izquierda se ha mostrado muy crítica con la gestión de José Ribera al frente del Consorcio de Residuos y, en particular, con el emplazamiento elegido para construir un macrovertedero en el término de Guadassuar, la segunda fase del proyecto.

El secretario de organización comarcal de Compromís, Rafa Oliver, justificó la designación de Montañana -admitió que falta hablar con los representantes de la Ribera Baixa y la Valldigna que forman parte del consorcio- al tratarse Guadassuar del municipio más implicado en los proyectos diseñados por el consorcio que ahora cesa. Cabe recordar que la Generalitat y la Diputación de Valencia también forman parte de este ente supracomarcal con un 40 % de la representación, mientra que el 60 % restante corresponden a los ayuntamientos. La izquierda tendrá por tanto una amplia mayoría para dar el giro que ha venido reclamando a la gestión. Incluso se ha llegado a barajar en algún momento la posibilidad de frenar las nuevas infraestructuras diseñadas por el PP, si bien la empresa adjudicataria de la primera fase del proyecto ya ha dejado claro que reclamará una indemnización si se paralizaran las obras de la nueva planta de tratamiento de residuos que, según el calendario establecido, debe entrar en funcionamiento en marzo de 2016 y sustituir a la actual planta de basuras. p. f. alzira

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