Existen pueblos en la comarca (como Gavarda) que no tienen ningún tipo de problema con el nombre de las calles. Partiendo del dígito 1, van numerando sus vías hasta que se acaban. Sin embargo, en la mayoría de las ocasiones parece que los políticos buscan las problemáticas, inmersos en formalismos inútiles y acciones supuestamente correctas políticamente pero que ocultan insultos como puños. Sueca decidió la pasada semana no dedicar dos calles a los luchadores antifascistas Virtudes Cuevas (nacida en la localidad) y Amado Granell (fallecido en un accidente de tráfico a su paso por Sueca).

Desconozco si el lector o lectora conoce la trayectoria de los dos republicanos valencianos pero sólo les informaré que cuentan con la mayor distinción que otorga el ejército francés (la Orden de la Legión de Honor), en el caso de la suecana entregado por el mismo Charles De Gaulle tras compartir Madamme Carmen (su pseudónimo en Francia) estancia en los campos de concentración con la hija del destacado político galo. No es suficiente. Compromís, el Grup Independent de Sueca, El Perelló y Mareny de Campillo, PP y Ciudadanos de Sueca se envolvieron en un sinfín de excusas de credibilidad y peso histórico dudoso para desestimar la propuesta de los socialistas.

El pintor Conrado Meseguer aún no tiene calle, dijeron. Enormes. El argumentario recuerda a aquel PP que en época de Zapatero se opuso a que los enlaces entre los homosexuales se denominasen matrimonios, cuando realmente embrutecían el terreno para protestar contra los mismos enlaces. Ahora el viento de la historia no recomienda recordarlo. Pasará una situación similar con el reconocimiento de los demócratas que lucharon por toda Europa para acabar con el fascismo. Pronto o tarde, la razón se impondrá y este Estado que heredó tantos malditos vicios del franquismo claudicará a la presión ciudadana para reconocer a los demócratas, como hacen en Francia cada año. Será entonces cuando esos políticos de Sueca avanzados a su tiempo ocultarán su decisión de bloquear la propuesta del PSPV-PSOE.

Por cierto, Virtudes Cuevas dio su casa al ayuntamiento antes de morir para que se construyese allí un museo antifascista donde se pueda recordar que la lucha de los republicanos españoles fue vital para acabar contra el nazismo. Un fascismo (por estas tierras franquismo) que se debe combatir día a día, todavía hoy. Siguen existiendo calles dedicadas a golpistas como Emilio Mola, Arias Navarro, Juan Yagüe, José Millán-Astray o los caídos de la División Azul. Insultos a la democracia que no se curan con imparcialidad barata. Sólo se combate apostando por aquellos que lucharon con sus vidas para que todos hoy podamos votar. El museo de Virtudes Cuevas sigue esperando.

He tenido la suerte, junto a Ximo Vidal, de trabajar (y convertir en un libro que se publicará en breve) la vida de los vecinos y vecinas de la Ribera que pasaron por los campos de exterminio nazis. Virtudes Cuevas estuvo entre ellas y fue protagonista de una vida de compromiso y lealtad a unas ideas que hoy nos permiten ser un país libre de dictadores.

Madamme Carmen luchó todavía en territorio español contra el golpe de Estado franquista para después continuar con su trabajo contra el fascismo en la clandestinidad francesa, ejerciendo de enlace entre los diferentes grupos de lucha contra los alemanes y franceses colaboracionistas. Acabó presa y trasladada a los centros de exterminio (exactamente a Ravensbrück), donde conoció a Geneviève de Gaulle, hija del político. Salió y vivió después en Francia, aunque volvió a Sueca para ser homenajeada antes de morir. Amado Granell es más conocido (dentro del desconocimiento general) al ser miembro de La Nueve, un batallón de republicanos españoles temido en toda Europa y que fue clave en la liberación de París y, con ello, en la derrota final del nazismo. Pese a ser de Borriana, descansa en el cementerio de Sueca al fallecer en un accidente de tráfico en término ribereño.

Si el pueblo no conoce a Virtudes Cuevas o a Amado Granell nunca los introducirá en el imaginario colectivo y, por supuesto, nunca se les reconocerá su labor. Coincidir con calles en su honor ayudaría a crear curiosidad. Flaco favor a la democracia el de Compromís, GISPM, PP y Ciudadanos de Sueca.