Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Fomento mantiene destrozados varios caminos rurales desde hace cinco años

El Ayuntamiento de Cullera recibe quejas por parte de los agricultores que no pueden circular con su maquinaria por el pésimo estado de los viales tras la paralización de las obras del desvío

Fomento mantiene destrozados varios caminos rurales desde hace cinco años

Con la parálisis en 2010 de las obras del tramo Cullera-Favara en la autovía A-38 por los recortes del Estado en materia inversora, varios caminos rurales cercanos a las intervenciones que se realizan en este tramo quedaron destrozados. Tras cinco años desde el cese de las obras, estos accesos continúan en el mismo estado. La suspensión de las obras, que llevó a cabo el anterior gobierno socialista se produjo como consecuencia de la crisis y afectó de forma directa a la variante Cullera-Favara. Cinco años después la situación no ha cambiado.

Los caminos rurales que daban acceso a las obras quedaron visiblemente dañados y aún ahora continúan como entonces. Según fuentes municipales, los camiones que efectuaban las obras eran de 40 toneladas y las carreteras, a pesar de ser de asfalto, no estaban preparadas para soportar ese peso, por lo que se han producido graves daños que siguen sin reparar.

En total, son cinco los accesos rurales municipales perjudicados por la maquinaria en los trabajos que se efectuaron para preparar el terrenos, que comprenden los caminos del Rajolar, Allargats, Xafarines, les Rabases y Ràfol.

El ayuntamiento de Cullera ha recibido diversas quejas por parte de los agricultores, que sostienen que su maquinaria tiene difícil acceso debido al pésimo estado de los caminos.

Durante estos años, y en la medida de sus posibilidades, el consistorio cullerense ha llevado a cabo intentos de reparación pero no han pasado de parches en unas vías muy deficitarias.

De hecho, durante esta semana, el consistorio ha llevado a cabo una intervención, en la que se ha allanado el Camí dels Allargats, para facilitar el paso a las segadoras. Aún así, tal y como explica el consistorio, «están impracticables». A raíz de las peticiones de la ciudadanía, el Ayuntamiento de Cullera presentó un informe recientemente en Madrid al Secretario General de Infraestructuras, Manuel Niño, en el encuentro que mantuvo con el alcalde de la localidad, Jordi Mayor, para analizar la situación del punto negro de la red viaria estatal que comprende el viaducto de acceso norte a Cullera.

Reparación cuanto antes

El consistorio considera que los caminos dañados deberían repararse cuanto antes, para evitar accidentes y daños a los agricultores que acceden a sus tierras a través de los mismos y, sobre todo, para corregir las molestias que estos están sufriendo.

Ante la demanda, Fomento se comprometió a visitar la zona afectada y prometió estudiar la situación. De esta forma, el Ministerio comprobará el estado en el que están los caminos y se muestra predispuesto a arreglarlos.

Compartir el artículo

stats