Las imágenes en las que unos niños rociaban con spray de espuma blanca y se fotografiaban junto a un toro muerto tras una de las novilladas de la semana taurina de Algemesí no se repetirán.
La Comisión Taurina, entidad que organiza los festejos e instala el coso taurino en la plaza Mayor, es consciente de que la imagen que se propaga de esta celebración no es la adecuada y más cuando hay menores de por medio y en un espacio tan concurrido como la puerta principal de la plaza de toros de Algemesí. Por ello ha decidido coger el toro por los cuernos y eliminar de raíz la posibilidad de que puedan tomarse de nuevo.
El pasado jueves por la tarde, un día después de que las imágenes fueran difundidas por organizaciones defensoras de los derechos de los animales a través de las redes sociales, la entidad que preside Alberto Fernández ya decidió que en la corrida de ese mismo día el toro saliera de la plaza y se acelerara su marcha.
Además el animal es cubierto con una lona desde este jueves cuando lo recoge el tractor para el traslado. Con ello se pretende evitar que alguna persona pueda fotografiarse de nuevo junto al toro muerto ya que las imágenes no han gustado ni el ayuntamiento ni en la comisión taurina.
El toro quedaba a la vista de todos
Hasta el momento, el toro quedaba unos minutos en el suelo en la puerta de la plaza y a la vista de todos hasta que un tractor se lo llevaba. Incluso se habían convertido en habituales las fotografías de adultos y niños junto al astado muerto e incluso el uso de la espuma blanca sobre el cuerpo del animal. Colectivos animalistas defendían esta semana que este tipo de actitudes suponen otra forma de maltrato hacia el animal y en algunos casos dudaban incluso de que el animal no estuviera aún con vida.
El equipo de gobierno de Algemesí, formado por PSPV y EUPV, felicitó el mismo jueves a la comisión taurina por su decisión.
El ayuntamiento, gobernado por la izquierda, tampoco quiere que se repitan unas imágenes que, según explican, dañan valores como el del respeto hacia los animales que, según admiten, están cada vez más arraigados entre los ciudadanos. El propio equipo de gobierno admite que las imágenes que han circulado estos días en las redes sociales y han publicado los medios de comunicación son «desagradables» e «impropias» para la imagen de la ciudad.
Con todo, el gobierno que lidera Marta Trenzano asegura que 2015 ha sido un año de importantes cambios para la Semana Taurina de Algemesí, la feria de novilladas sobre la que colectivos abolicionistas han puesto el foco desde hace años.
El cambio más importante se produjo el pasado mes de marzo cuando las propias peñas cadafaleras apoyaron la conversión de las becerradas en una simple capea en la que el animal no recibiera ni banderillas ni estoque. Y esa modificación se concretó el pasado lunes por la noche cuando se celebró la primera becerrada cadafalera de la historia sin sangre y los seis becerros que salieron a la plaza volvieron a los corrales sanos y salvos, según confirmó el ganadero suecano Gregorio de Jesús.
Ayer, la alcaldesa, Marta Trenzano, admitió que existe una mayor sensibilidad y defendió que se si mejora la imagen de estos festejos se está dando un paso más en favor de la convivencia pacífica. De hecho ella misma emitió un bando en el que hacía un llamamiento al vecindario para evitar que se repitieran los incidentes del año con heridos y detenidos.
