El Ayuntamiento de Carcaixent, gobernado por Compromís, ha trasladado al propietario del campo de golf de la Galiana, Carmelo Ezpeleta, que no pondrá impedimento alguno a la construcción del hotel de cuatro estrellas que los gestores del recinto deportivo quieren empezar a construir en 2016.
Ezpeleta se ha reunido con los responsables municipales para trasladarles su proyecto, que va a suponer una inversión en torno a los siete millones de euros, y conocer de primera mano si el ayuntamiento va a poner alguna pega.
El nuevo gobierno, que en su momento se opuso a la construcción del campo de golf cuando estaba en la oposición, considera que ahora las circunstancias son diferentes: el campo ya está en funcionamiento y necesita el hotel para hacerlo rentable y que su visitante pueda quedarse varios días porque la Ribera apenas dispone de hoteles de este tipo y los más cercanos están en Gandia, Oliva o el Saler.
Los técnicos de la empresa del ejecutivo de Dorna ya han planteado al ayuntamiento la necesidad de adecuar los viales de acceso a la parcela donde se construirá el hotel según sus necesidades. Se trata de una cuestión muy técnica porque se requieren modificaciones a la situación actual.
El alcalde, Paco Salom, trasladó que mientras se cumplan las normas, se haga todo con transparencia y se pueda explicar a la ciudadanía, el ayuntamiento no tiene ningún problema en avalarlo. Salom admite que su partido se opuso al proyecto, pero entiende que ya es irreversible y que una vez esté en funcionamiento pueda convertirse en un instrumento que cree riqueza en Carcaixent y la Ribera y pueda ampliar la oferta comarcal de cara al turismo.
El hotel ya estaba previsto cuando se construyó el campo de golf porque es clave para el negocio. La intención es construir un cuatro estrellas con piscina y campos de fútbol, que permita atraer un perfil de turista relacionado con el golf y con el deporte en general. Tendría en torno a medio centenar de habitaciones y sería ideal, señalan, para concentrar equipos de fútbol.Los concejales de Compromís ya han visitado las instalaciones y admiten que se está realizando una buena gestión medioambiental.
