El gobierno de Alberic sufrió ayer una baja. El teniente de alcalde Bernat Hervàs, de Ciutadans, formalizó su renuncia al escaño tras varios meses bastante alejado de la gestión municipal. El escrito presentado por registro de entrada justifica su dimisión por la «imposibilidad» de poder ejercer la labor de concejal por motivos personales y laborales.
Hervás fue uno de los concejales que apoyaron la moción de censura que en el anterior mandato elevó a Toño Carratalá a la alcaldía y participó con él en la candidatura de Ciutadans per Alberic con la que volvió a concurrir el pasado mes de mayo. No obstante, pese a formar parte del círculo más próximo a Carratalá, desde hace ya algunas semanas la previsible renuncia de Hervàs era un secreto a voces. El edil fue el objetivo de las invectivas de la oposición en el pleno de septiembre por haber firmado la conformidad de una factura por importe de casi 9.000 euros por la adquisición de equipamiento deportivo para una sala de rehabilitación que no había sido entregado. Algunas fuentes sitúan en la polémica suscitada por esas facturas el punto de inflexión en la trayectoria política de Hervàs ya que, desde entonces, no ha vuelto a asistir a ningún pleno. Este periódico intentó contactar ayer con el edil, aunque no atendió las llamadas telefónicas. El alcalde de Alberic, por su parte, defendió que la renuncia se debe a motivos exclusivamente personales.
Cambios en la Policía Local
Se da la circunstancia de que el mismo día que el concejal de Policía -la única delegación que Hervás conservaba tras la remodelación del gobierno con la entrada del PSPV- presentaba la dimisión, el actual jefe de la Policía Local, Javier Hernández, también comunicaba por escrito su próxima salida del cuerpo al no haber solicitado la prórroga para la comisión de servicios que le ha permitido ocupar el puesto en los últimos cinco años. Su marcha se hará efectiva el próximo 31 de enero. Hernández había llegado a Alberic de la mano de Bernat Hervàs y se marcha al mismo tiempo que él para regresar a su plaza en Villanueva de Castellón. El agente también eludió ayer pronunciarse sobre esta coincidencia. Algunas fuentes, no obstante, atribuyen la marcha a cierto malestar al sentirse ninguneado como responsable del cuerpo.
Con todo, el escrito oficial de renuncia del quinto teniente de alcalde del Ayuntamiento de Alberic cierra filas formalmente con el actual gobierno y, tras justificar la renuncia por no poder desempeñar el cargo por cuestiones laborales y personales, le desea «toda la suerte del mundo para gobernar este pueblo» y expresa el agradecimiento por el tiempo que ha podido desempeñar el cargo de concejal hasta señalar que «ha sido un verdadero honor trabajar estos años con este grupo».
El alcalde de Alberic reconoció que el edil llevaba algunos meses «desconectado» del ayuntamiento y, si bien admitió que polémicas como la suscitada por la factura del material deportivo pueden generar desgaste -IXA-Som Alberic llegó a pedir la dimisión del edil-, defendió que su renuncia no tiene nada que ver. «Son situaciones personales que se producen. Lamentamos que se lo tenga que dejar, pero es nuestro amigo y le vamos a apoyar. En la vida hay que priorizar y si no puede atender las obligaciones del cargo, le honra que haya decidido apartarse», incidió Carratalá.
El siguiente en la candidatura de Ciutadans per Alberic ex el exconcejal Paco Bernal, que ya compartió tareas de gobierno con el alcalde en el anterior mandato, aunque diferentes fuentes apuntaron que muy posiblemente no tomará el acta de concejal y el que entrará en el ayuntamiento será David García López. El alcalde se limitó a comentar al respecto que tocaría entrar a uno o al otro.
