La Asociación de Madres y Padres y Alumnos (AMPA) del colegio público de El Perelló vuelve a manifestarse. Se ha acabado su paciencia. Tras casi doce años de reivindicaciones y con las obras de la nueva escuela acabadas desde febrero, consideran «indignante» que los alumnos sigan en barracones y que la situación todavía esté bloqueada por razones administrativas. Entienden que «ya es hora de tomar medidas para que por fin los niños puedan dar clase en condiciones». Por ello, hoy mismo, padres madres y escolares se concentrarán durante una hora a las puertas del colegio desde las nueve de la mañana en señal de protesta.
Fuentes de la asociación de padres advierten de que «no pararemos hasta que nos den una solución y si tenemos que llamar la atención del conseller de Educación, Vicent Marzá, a través de manifestaciones y medios de comunicación, lo haremos».
El alcalde de la entidad local menor, Andrés Fernández; el concejal de Educación, Juan Botella; y representantes de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos del colegio público de El Perelló se reunieron a mediados del mes pasado con representantes de la Conselleria de Educación para intentar conocer de primera mano las razones del bloqueo. Fueron atendidos por el director general de Centros y Personal Docente, Joaquín Carrión; la asesora del secretario autonómico, Miguel Soler; y la dirección de obra del colegio.
En esa reunión fueron informados de que el expediente todavía estaba en el departamento de Intervención, que les habían confirmado que se estaban realizando los trámites oportunos y que aproximadamente en un par de semanas podría estar solucionado, según explicó a este diario Juan Botella. Y que a partir de ese momento, los responsables de la Conselleria de Educación necesitarían de otras dos semanas para ultimar todos los detalles y poder hacer efectivo el traslado de los niños al nuevo edificio, explicó el concejal responsable.
Fin de curso en barracones
Así, parece poco previsible que los alumnos puedan finalizar el curso en el nuevo centro antes de que finalice el curso, muy a pesar de que las obras acabaron hace prácticamente medio año.
El ayuntamiento de la entidad local menor ya tiene todo a punto para adjudicar las obras de la segunda fase, que consisten en retirar los barracones y realizar la obra pendiente en la zona del polideportivo, donde se ha ubicado el nuevo centro escolar. Estas obras incluyen la construcción de un nuevo frontón, gimnasio, vestuarios, una pista polideportiva cubierta y la habilitación de juegos infantiles.
El colegio se ha construido sobre una superficie de 6.100 metros cuadrados y tiene capacidad para 225 alumnos, distribuidos en tres unidades de educación infantil y seis de primaria. Consta de planta baja y una altura y contará con comedor, cocina, aula de informática, biblioteca y aulas polivalentes.
