Los tomates de los hermanos Peiró empiezan a estar en boca de todos. Los vecinos de la Pobla, donde residen, y los de Rafelguaraf quieren incluir en sus menús diarios este fruto. Antes si quiera de ganar el premio, tuvieron una gran repercusión en la primera feria agrícola celebrada en la Pobla Llarga, donde se llegaron a vender unos 300 kg en una hora y media. Pero el reciente éxito competitivo ha hecho que el nombre de Naranjamania crezca un poco más, sobre todo en las redes sociales, donde ya se aprecia la repercusión del galardón. Estos agricultores venden sus productos a través de internet, recogen las frutas y las mandan a sus compradores: «Tenemos una filosofía de agricultura tradicional y ecológica, por lo que no se guarda el género en almacenes ni se le añaden productos para su conservación, va del árbol al lugar que nos pidan», explica Paco. Cada vez más agricultores ven con buenos ojos apostar por este tipo de dinámicas productivas, internet es una herramienta que les permite crecer y vender sus cultivos a mucha más gente. Los Peiró ofrecen en su página web, también, subproductos derivados de sus plantaciones tales como mermeladas o confituras, entre muchos otros, todos naturales. r. s. rafelguaraf