El Ayuntamiento de Alzira ha reaccionado al detectar que muchos hosteleros se excedían a la hora de ocupar el espacio público con sus terrazas. Para controlar mejor las delimitaciones de cada negocio, la concejalía de Seguridad y Proyectos Urbanísticos tiene en marcha un plan para acotar las zonas que cada establecimiento podrá usar para montar mesas. A su vez, la edil del área, Sara Garés, ha manifestado la intención de sancionar a «aquellos que incumplan las ordenanzas y dificulten la convivencia del resto de viandantes».
En las actuaciones realizadas hasta el momento, en las zonas de la plaza Mayor, la Vila y la avenida Santos Patronos, el ayuntamiento ha detectado una gran cantidad de hosteleros que excedían el espacio que tenían reservado, lo que ha generado molestias a la ciudadanía: «Los vecinos se quejan porque no pueden circular libremente por las aceras, en casos de padres con carritos o personas que vayan en silla ruedas se ha acabado convirtiendo en un problema», explica la edil de Seguridad.
Además, la concejal señala que esta circunstancia también ha suscitado el malestar de otros comerciantes: «Hay dueños de bares que cumplen con los límites marcados; otros, incluso, usan menos superficie de la que tienen contratada, lo que es una verdadera falta de respeto», sentencia. El objetivo «es que se cumpla con las ordenanzas y se ocupe el espacio que tienen autorizado para su negocio, y así preservar el espacio para la libre circulación de los viandantes», explica Garés.
Es por eso que agentes de la Policía Local han empezado a marcar los límites de las terrazas de los diferentes bares y restaurantes de Alzira. Para ello se utiliza una plantilla, diseñada por el propio cuerpo, con el escudo municipal. Se realizan las marcas en las esquinas según el espacio contratado por cada hostelero y, de este modo, el consistorio podrá controlar quiénes cumplen con la normativa y castigar a los que la infrinjan: «Los hosteleros que se salgan de sus marcas serán avisados, en una primera instancia, y si persisten, el ayuntamiento les sancionará ya que, si tienen contratados un número determinados metros, se deben ceñir a eso», sentencia Garés.
Tras el parón estival, el ayuntamiento seguirá delimitando las terrazas de todos los bares de la localidad y controlará, en la medida de lo posible, que los hosteleros no excedan su zona marcada.
