Una mujer resultó herida como consecuencia de una explosión de gas en la cocina del apartamento de Cullera donde estaba veraneando. El estallido provocó quemaduras de primer grado y contusiones en brazos y piernas de la inquilina, quien ayer manifestó que «he vuelto a nacer».
Lola Roch estaba preparando ayer un sofrito en la cocina y tenía una lasaña en el horno, en el piso de la playa de Cullera que había alquilado para pasar las vacaciones, cuando se produjo una fuerte explosión de la bombona de gas que la lanzó al suelo. «Vi la enorme llamarada», explicó a Levante-EMV.
La detonación provocó que el horno saliera disparado y le cayera encina, lo que le supuso las quemaduras. Su hijo pequeño, que estaba a su lado, se salvó porque del impacto se abrió la puerta de la nevera y lo aisló.
Roch, quien trabaja de profesora en el colegio Santa Teresa del Vedat y es también exconcejala de Educación en el Ayuntamiento de Torrent, narró a este diario que ella misma, mientras estaba en estado de «shock», cerró el gas, salió con su hijo a la galería, entró a la vivienda por una ventana y desalojó el apartamento donde estaban también su otro hijo y su sobrino. «Por la escalera llamé al 112 y toqué los timbres para desalojar la finca», indicó la torrentina poco despés de la explosición que destruyó la cocina del apartamento.
Primeras atenciones médicas
Lola Roch recibió la primera ayuda médica de una farmacia cercana y luego de unidad del SAMU que se desplazó al lugar del incidente y que que la trasladó hasta el hospital. Pese a la gravedad de los hechos, ayer por la tarde acudió al cuartel de la Guardia Civil a dar parte de los hechos.
La explosión destrozó la cocina, hizo saltar el mármol y provocó el desplome parcial del techo en esta estancia y también en el cuarto de baño.
