Cullera confirma las previsiones más optimistas que ya se atisbaban en los meses de junio y julio, y agosto se convierte en el mejor mes de los últimos 10 años y con una tendencia positiva que ha llevado a muchos establecimientos de la ciudad a colgar el cartel de completo, especialmente durante los fines de semana, y resultará muy complicado encontrar una plaza para pernoctar. La ocupación hotelera se ha situado en un 98 % durante todo el mes de agosto, en especial los fines de semana, aunque en algunos establecimientos solo se llegó al 96 % con algunas plazas libres entre semana.
Los responsables hoteleros han hecho especial hincapié en la semana del puente del día 15 en la que faltaron vacantes que ofrecer. Los responsables de los hoteles de la ciudad, que ofertan en total cerca de 2.500 alojamientos, han mostrado su satisfacción por la evolución que ha tenido este verano, afirmando que «posiblemente este sea el mejor verano de la última década, no solo agosto, sino que también los meses de junio y de julio».
La masiva presencia de turismo nacional, especialmente procedente del centro de la península, aunque este año se ha tonado también un incremento importante del turista llegado del norte de España, en especial del País Vasco, buscando el buen clima, así como también turistas llegados desde Extremadura, Aragón e incluso desde Cataluña. Respecto del turismo internacional, Cullera ha recuperado al turista francés, en especial, con un importante incremento en hoteles y apartamentos superando un crecimiento del 55%. En la misma línea se ha visto un crecimiento en el turismo belga, los cuales han doblado, con mucho, el número de visitantes de años anteriores. Aunque también ha crecido la visita del turista anglosajón durante este mes de agosto. Han seguido, como visitantes, los holandeses, alemanes e italianos, por ese orden, con incrementos en algunos casos cercanos al 30%.
Es de destacar que la ocupación de apartamentos, analizando los regulados y oficiales, se ha situado muy próxima al 95%, destacando una subida porcentual de más de 7 puntos sobre la ocupación del mismo mes el año pasado donde se situaba en el 88%.
La hostelería ha mostrado su satisfacción por como se ha dado el mes de agosto, con importante presencia de visitantes en los comedores. Los restaurantes de la playa han tenido que doblar e incluso triplicar mesas, especialmente durante las comidas, llegando en algunos momentos a tener que finalizar el servicio de comidas a las 18 horas. Destacan los propietarios de los restaurantes que ha vuelto la costumbre del tapeo e incluso de hacer la tradicional «picada» que se hacía hace unos años y que parecía que estaba en vías de desaparición.
En muchos momentos del mes de agosto, en especial en el puente, algunos restaurantes han tenido incluso que no aceptar más comensales.
