Evaristo Ribes señaló que, por lo que le está llegando, las bases del partido no son muy partidarias del acuerdo adoptado por el comité federal y el mandato al grupo parlamentario para que se abstenga en la segunda votación del pleno de investidura, lo que propiciará la elección de Mariano Rajoy como presidente. Cabe recordar que las dos agrupaciones del PSPV en la comarca se habían posicionado en contra de una abstención que propiciara un nuevo Gobierno del PP.
El «no es no» que en su día proclamó Pedro Sánchez se repitió en las reuniones de las ejecutivas comarcales celebradas tras el convulso fin de semana que registró la dimisión del secretario general de los socialistas tras perder una votación y la elección de una gestora que ha acabado reorientando la postura del partido para evitar unas terceras elecciones generales.
La ejecutiva del PSPV de la Ribera Alta acordó por un lado exigir al secretario general, Ximo Puig, que convocara un comité nacional para explicar su renuncia como miembro del comité federal y, acto seguido, reafirmó su negativa a que una abstención del PSOE pudiera propiciar la elección de Rajoy como presidente del Gobierno u otro ejecutivo del PP.
La dirección de la Ribera Baixa, por su parte, aprobó una resolución en la que tras expresar el malestar de la militancia con todo lo sucedido, advertía a la dirección que no había «ninguna otra postura asumible» que un no a Rajoy y, ante la perspectiva de que esa coyuntura derivara en la celebración de nuevas elecciones en diciembre, reclamaba la convocatoria de un congreso federal para elegir al candidato a la presidencia del Gobierno.
El malestar generado en las bases por los acontecimientos desencadenados en el PSOE provocó incluso que la agrupación de l'Alcúdia acordara pedir la dimisión de Puig como secretario general.
