Este caso no es el primero que se ve en la comarca. Durante los últimos años, se han repetido operaciones similares que destapaban organizaciones con el mismo «modus operandi». Sin ir más lejos, hace dos años tuvo lugar un gran operativo que permitió liberar de este tipo de explotación laboral a 150 temporeros entre la Ribera y la Safor, también de nacionalidad extranjera, mayoritariamente rumana y búlgara. Meses más tarde, se desarticulaba una banda similar que actuaba de la misma manera con trabajadores de origen senegalés. Estas mafias se aprovechan del miedo y del desconocimiento del inmigrante al llegar a un nuevo país para extorsionar económicamente a las víctimas. l-emv. alzira