Ha pasado ya un tercio de temporada para los equipos de Preferente. Pese a ello, aún quedan equipos que necesitan pulir sus plantillas como es el caso de Atlètic d'Alginet y Carcaixent. Los dos conjuntos han sumado efectivos recientemente para fortalecer sus puntos flacos. En el caso de los de David Ibáñez, se ha incorporado un fichaje de relumbrón para la zaga como es Miguel Ángel Ortega; mientras que las filas de José A. Castillo se han visto engordadas con la llegada Álvaro Fontana, en primer lugar, y la de Joan Gandía, posteriormente.

El inicio de liga está siendo complicado para el Atlètic. Los resultados no acompañan a un equipo que ha sumado tan sólo 5 de los 33 disputados hasta el momento. Su casillero particular únicamente refleja una victoria y nada menos que 24 goles encajados, todavía con el doloroso recuerdo del set en blanco recibido en Dénia. Consciente de ello, la directiva ha decidido mover ficha para firmar a un zaguero que cuenta con gran experiencia en el fútbol regional como es Miguel Ángel Ortega. El defensa se encontraba sin equipo en la actualidad, aunque hay una larga lista de conjuntos que forman un currículum a la altura de muy pocos en la categoría. Alginet, Cullera, Castellonense, Vinaròs, Villarreal B y una gran cantidad de clubes tanto de Preferente como de Tercera.

Por su parte, el Carcaixent se encuentra inmerso en una cierta irregularidad. Situado en mitad de tabla, ha sumado dos derrotas en los últimos tres partidos. El equipo se ha visto abonado al empate y su situación en la clasificación se debe en gran medida a esa circunstancia, que le ha permitido sumar de uno en uno y mantenerse alejado de la zona baja. La primera de las novedades en las filas de José A. Castillo fue incorporar al centrocampista Álvaro Fontana. El viaje fue relativamente corto ya que Fontana militaba en la UD Alzira. Pero no contento con un único fichaje, también se han contratado los servicios del guardameta Joan Gandía, procedente del Simat. La llegada del arquero era más que necesaria, no en balde la portería tan sólo estaba cubierta por Jordi Bou tras la baja de Cristian Ahulló, ocupando su lugar en el banquillo en los últimos encuentros Álex Fillol.