La recuperación de la Muixeranga fue durante muchos años una de las asignaturas pendientes en Cullera. Corría el año 2011 y un grupo de gente con contactos con «muixerangers» de otras poblaciones como Algemesí o Sueca empezaron a dar los pasos necesarios para llevar adelante el proyecto tan deseado por los amantes de la cultura tradicional en la ciudad. Antes ya se había trabajado intensamente en la recuperación de bailes, danzas y del «tabalet i dolçaina». En la efeméride la Muixeranga de Cullera realizó un pasacalle por la localidad acompañada del sonido de «tabals i dolçaines» y se montaron dos «sénies», un rematado de torreta infantil y un cinco en un pie. La innovación, sin embargo, llegó al final. Se trata del «remat» de la caña, una figura que consta de 4 alturas, con tres bases, dos segundos, levantador y niño.

Esta nueva figura fue muy emotiva, puesto que se la dedicaron a uno de los promotores de la creación de la Muixeranga de Cullera, Miquel Martínez, que fundó la «colla» y que todavía hoy es uno de los miembros más activos de la misma. A continuación, fue elegido el nuevo maestro de la Muixeranga, Rafa Gimeno, quien dedicó algunas palabras e hizo entrega de un obsequio a su antecesor, Joan Escrivà.