La Pirotecnia Crespo echó el resto ayer en casa en una «mascletà» alcireña que encandiló a las miles de personas aglomeradas en los aledaños, en una mañana calurosa que obligó a intervenir a los servicios sanitarios. La empresa de Alzira quiso quitarse la espina del año pasado y puso en funcionamiento

El palco de autoridades estuvo repleto. A los alcalde de Alzira, Benimuslem, l'Alcúdia o Villanueva de Castellón les acompañó también el presidente de las Corts Valencianes, Enric Morera, quien confesó a este periódico que las fallas de Alzira «son auténticas, tienen un nivel de personalidad muy grande porque no cuentan con las masificaciones de València y se respira un ambiente muy valenciano por las calles. Yo soy un fijo, sí. He estado en todas las fallas».

También estuvieron la directora general de Instituto Valenciano de las Mujeres y por la Igualdad de Género de la Generalitat Valenciana, Maria Such; y Antoni Such, director general de la Administración Local a nivel autonómico.

Ahora ya sólo queda la «mascletà» que lanzará hoy Reyes Martí, la pirotécnica ganadora de la edición del año pasado.