Bañarse en las playas de Cullera es una experiencia grata de principio a fin. Por la calidad de sus aguas y también por la de sus servicios. A estos últimos se añaden ahora los denominados «Puntos cómodos» con los que se facilita que los bañistas puedan deshacerse con más facilidad de la molesta arena.

Dichos puntos están compuestos de perchas y taburetes diseñados especialmente para adaptarse a las necesidades del usuario de la playa. Las primeras son de 1,50 m de altura visible, fabricadas en tubos cuadrados de 80 x 80 mm de acero inoxidable con acabado brillo. Cada percha lleva 2 asas redondeadas y ergonómicas, una por cada lado, a diferentes alturas para poder colgar bolsos, toallas, hamacas, etc. e incluso apoyarse sobre las mismas.

Por su parte, las sillas tienen una superficie de 60 cm de dia?metro. Son ergonómicas y en polietileno de alta densidad de 16 mm de grosor de 2 colores. Toleran bien las altas temperaturas, el sol y las humedades de la playa.

El ayuntamiento ribereño es el primero de la Comunitat que ha instalado estos dispositivos junto a los lavapiés. El objetivo es hacer más confortable el aseo posterior al baño. Estos puntos entrañan menor dificultad para personas mayores a la hora de apoyarse o colgar objetos momentáneamente. También están pensados para las familias con niños pequeños ya que los padres o cuidadores pueden liberar las manos en el momento del «aclarado».

«Aunque es un dispositivo sencillo, resulta de gran utilidad para determinados colectivos con movilidad reducida o para los padres que deben cargar con los hijos y todo el kit de playa», ha destacado el concejal de Playas, Salva Tortajada.

Pruebas

La prueba piloto se desarrolla en 15 puntos de la bahía desde Los Olivos hasta el Espacio, incluyendo las zonas accesibles. «Si vemos que tiene una buena aceptación, el año que viene seguiremos ampliando los puntos», ha indicado el edil.

Hasta ahora, lo más habitual era ver a los bañistas apostados en el muro del paseo marítimo intentando quitarse la arena porque les resultaba imposible aguantar la sombrilla, la toalla y todas las bolsas mientras se limpiaban. Con esta novedad en las playas será más fácil y cómodo llevar a cabo el proceso de «acicalamiento» en los lavapiés tras el baño.

Cullera siempre ha buscado la comodidad de los visitantes y vecinos. Ya fue la ciudad que instaló la primera playa accesible de la Comunidat Valenciana. El año pasado presento una plataforma donde los usuarios podian estar mojándose a la orilla de la playa en Los Olivos. Y este año no ha querido quedarse atrás.