Pese a que el can ya está dado de baja, son otros perros los que continúan con los métodos puestos en práctica por Nolan. De hecho, Talens se ha hecho cargo de otro perro policía que ha seguido los pasos de su mentor. Spock, que así se conoce a este pastor belga, se ha educado desde pequeño junto a Nolan, del cual ha aprendido a detectar sustancias estupefacientes. «Todos los conocimientos y errores de Nolan se han aplicado a Spock. Al convivir juntos, se transmiten de uno a otro», explica su dueño.

El adiestramiento de los perros detectores se realiza por un proceso de asociación. Con el objetivo de estimular el instinto de caza del perro, se enseña al animal a que su juguete desprenda el mismo olor que las sustancias estupefacientes. Por ello, el trabajo iniciado por Nolan no ha cesado gracias a su sucesor Spock, el cual desempeña su papel como perro detector.