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Un ensayo en el descuento aleja al Inter de Cullera y Alzira de sus primeros puntos

La formación de rugby entrenada por Beltrán y Chornet completan un excelente choque en el campo del quinto clasificado, el Barbarians

Integrantes de la formación que unifica a los clubes de Cullera y Alzira. levante-emv

Difícil papeleta la que tenía el Inter A de rugby en el complicado desplazamiento a las Baleares para enfrentarse al Barbarians XV de Calvià, un equipo formado, básicamente, como una selección de jugadores de las islas. En las últimas jornadas los de la Ribera habían demostrado una evolución a positivo que tenían que reafirmar ante los quintos clasificados de la División de Honor B. No lo consiguieron, por lo menos en lo que fue el resultado, ya que se cosechó una nueva derrota.

La primera parte fue muy buena en ataque, con una delantera que va mejorando el físico y eso se está empezando a notar en las fases del juego. Por primera vez en la temporada se volvió a dominar la «melé» como en la pasada temporada, pero volvió a tener ciertos problemas en la «touche». Por primera vez en la temporada, los hombres entrenados por Beltrán y Chornet consiguieron ponerse por delante en el marcador. Un ensayo de Víctor Sieres, transformado por Víctor Monserrat, y un golpe de castigo ponían a los ribereños por delante. Hasta que un error hizo que los Barbarians se fuesen al descanso con un 12 a 10.

Pero el Inter lo siguió intentando en el segundo periodo, aunque los locales apretaron desde el inicio de la reanudación, con un buen juego y una gran presión. Los de la Ribera no se conformaban y poco a poco intentaron quitarse esa presión, consiguiendo salir de su campo, aunque sin crear el peligro de la primera parte.

El final de partido fue trepidante. Los visitantes atacaban sin desmayo y con una fuerza física encomiable hasta que conseguían que el capitán Edu Calatayud realizase una espectacular jugada individual que acercaba al Inter en el marcador y a poder conseguir su primer bono del año. 20 a 15 a falta aún de dos minutos en los que todo era posible.

Quizás ese empeño y esa ansiedad por marcar llevó a los ribereños a un nuevo error en defensa que les costó un nuevo ensayo ya sobre el tiempo final. Un 27 a 15 que esta vez sí que sonaba a demasiado castigo para lo visto en el campo del quinto clasificado. Grandes elogios e incomprensión a la situación en la clasificación del Inter por parte de los tres últimos rivales, quienes felicitaron por el buen juego. El Inter, sin ir más lejos, es el conjunto más joven de la categoría.

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