El servicio sólo incorporó el año pasado un nuevo municipio, Benimodo, pero las multas de tráfico gestionadas por la Mancomunitat de la Ribera Alta aumentaron en 2017 un 26,5 % hasta alcanzar un importe bruto inicial próximo al millón de euros. La memoria del servicio de tramitación, gestión y recaudación de expedientes sancionadores por infracciones de tráfico refleja que los 21 ayuntamientos adheridos cursaron el último año un total de 9.344 multas frente a las 7.388 del año anterior. Se trata de prácticamente 2.000 infracciones más, de las que más de la mitad corresponden al repunte registrado en Carcaixent, el municipio de mayor población que utiliza este servicio mancomunado. No obstante, se trata de un incremento muy similar al del año anterior, cuando el aumento de expedientes tramitados fue del 27,6 %. En ese ejercicio se habían adherido al servicio Alfarp y la Pobla Llarga aunque, al igual que sucede este año, los expedientes tramitados por los nuevos ayuntamientos apenas resultan significativos. Valga como ejemplo que Benimodo contabiliza 32 saciones tras su adhesión en el segundo trimestre.
La estadística del último año refleja un aumento generalizado de las multas tramitadas por los ayuntamientos, con las únicas excepciones de Catadau, Manuel y Real. El descenso es especialmente llamativo en esta última localidad ya que supera el 60 %, si bien se trata de un volumen de expedientes moderado. En este caso, por ejemplo, pasa de los 162 de 2016 a 64.
Mucha mayor incidencia en el cómputo global tiene el aumento de multas en Carcaixent. Se trata del ayuntamiento que mayor cantidad de expedientes pasa al cobro a través de este servicio y, consecuentemente, también con el importe más elevado. En este caso, las 1.306 multas por infracciones de tráfico, con un montante total de 176.340 euros, suponen un incremento del 66 % respecto del año anterior, mientras que este mismo ayuntamiento cursó por separado otras 3.083 sanciones por denuncias de la ORA o Zona Azul, un 20 % más que en 2016, que en este caso suman otros 123.320 euros. Benifaió, Alberic y Carlet son los siguientes municipios que mayor cantidad de expedientes sancionadores tramitan -ver cuadro adjunto- y en todos los casos se han superado los registros del año anterior. En Alberic el incremento es del 34 %, de casi el 24 % en Benifaió y del 4,5 % en Carlet. Otros municipios que registran repuntes de más del 200 % son Senyera, Sumacàrcer o Llombai, aunque en términos reales se trata de un volumen de multas reducido. En Antella, que durante los primeros años destacó por el gran volumen de sanciones derivado de la regulación del aparcamiento en l'Assut, las cifras se han estabilizado y el último año tramitó 591 expedientes, un 12 % más que el año anterior tras dos ejercicios consecutivos de descensos.
Expedientes completos
La memoria de la Mancomunitat constata en paralelo al aumento de multas un aumento de la recaudación. En concreto, computa en 2017 unos ingresos de 314.261 euros. Se trata de un cifra bastante inferior al montante global de las saciones -948.710 euros- si bien cabe tener en cuenta que en aquellas infracciones que se abonan en los primeros veinte días cuentan con una bonificación del 50 %, que en algunos casos el implicado presenta alegaciones que pueden ser aceptadas, lo que deriva en el archivo del expediente, y que en los casos que se recurre al embargo el procedimiento se demora durante varios años, indicaron fuentes de la Mancomunitat de la Ribera, que señalaron que en cualquier caso todos los expedientes «llegan hasta el final».
El ente comarcal implantó este servicio de gestión y cobro de multas de tráfico en febrero de 2011 para propiciar que los ayuntamientos pudieran recaudar multas que hasta entonces se veían incapaces de cobrar ya que no podían exigir el pago fuera de sus municipios. La Mancomunitat puede hacerlo en toda la comarca si bien, además, ha firmado convenios que permiten cobrar incluso multas en el extranjero.
