La familia, que ya ha decidido llevar su caso ante la justicia, va más allá en su acusación contra Prosub. «En las sesiones con otros niños, en los que había muchos, el que más parecía con síntomas de autismo era el nuestro. Y no tiene, según han aceptado ellos mismos. No sabemos a cuántas personas puede estar afectando esto», arguye Tere. La madre del niño ribereño ha mantenido reuniones con la Conselleria de Sanitat Universal, que ha abierto un expediente para investigar el caso.