Los colectivos animalistas y las protectoras tienen claro que no están por la labor de que se repitan imágenes como las vividas la semana pasada en el barrio alcireño de l'Alquerieta, donde se extrajeron tres cuerpos decapitados de equinos del fondo de un pozo. Ya se han puesto manos a la obra para realizar movilizaciones, protestas y acciones reivindicativas para poner fin al maltrato animal que, según denuncian, se produce de manera reiterada en esta zona de la capital ribereña.

Durante varios días, bomberos y policía trabajaron conjuntamente para extraer los restos de la improvisada fosa. Los bomberos bajaron al pozo, de unos cuatro metros de profundidad, con máscaras para protegerse de las emanaciones que generaba la putrefacción. Allí descubrieron restos en diferente estado de descomposición. Algunos de ellos podrían llevar semanas en el hoyo, según explicaron fuentes oficiales.

La dantesca imagen ha generado un gran revuelo y ha removido una gran cantidad de conciencias, sobre todo en el colectivo animalista de la población. «Es el momento de pasar a la acción, no podemos tolerar este tipo de maltrato continuado en l'Alquerieta», aseguró ayer el portavoz de la protectora alcireña Lacua, Rafa Castany, que prosiguió: «Durante mucho tiempo se ha levantado la mano. De cara al público es un hecho atroz, pero sabemos que hay maltrato animal a diario».

Gran cantidad de rescates

Castany destacó que a raíz de la noticia publicada por Levante-EMV el pasado sábado, ha surgido una iniciativa por parte de la ciudadanía alcireña que se concretará en una concentración en forma de protesta. Ésta se celebrará en las próximas semanas, en una fecha todavía por determinar.

El portavoz de Lacua subrayó que en la actualidad «existe una cierta impunidad» en lo que respecta al maltrato animal en dicho barrio. «Cualquier animal que entra allí tiene los días contados, hemos hecho muchos rescates de animales que se encontraban destrozados. Entiendo que hay algo de miedo, pero se pasan por alto actitudes que se deberían sancionar», aseguró. En ese sentido, llamó a reforzar la legislación municipal y a intensificar los controles. «Que se requisen los animales en malas condiciones», añadió.