La protectora alcireña Lacua ha rescatado a ocho perros, dos hembras con sus respectivas camadas, en Alzira y Benicull. Además, cuando se encontraron a los animales, uno de los cachorros había fallecido debido a las condiciones meteorológicas que había sufrido. Las intervenciones se produjeron con cuatro días de diferencia.
La vivencia de Chica y Brave es «la enésima historia de abandono y maltrato animal en Alzira y alrededores», explica la protectora. Una de ellas fue encontrada en el aparcamiento del paraje natural de la Murta. Junto a ella se hallaban cuatro cachorros diminutos. Cuando la encontraron «estaba exhausta y muerta de miedo», relatan fuentes de Lacua.
El segundo de los rescates se produjo en Benicull. Allí localizaron a Brave, que se refugiaba de la lluvia y el frío debajo de un automóvil, donde alimentaba a sus tres cachorros. No obstante, uno de ellos estaba muerto cuando se procedió a recogerlo de la calle.
«Los rescates fueron posibles gracias al ofrecimiento de dos familias como casas de acogida, que posibilitaron coger a las ´mamis´ junto a todos los cachorros, aumentando así las posibilidades de supervivencia de los lactantes», aseguraron las mismas fuentes. En estos momentos, las dos perras y sus mascotas se ecuentran en adopción y buscan un nuevo hogar.
Lacua subraya la importancia de la esterilización como la medida más eficaz para acabar con el abandono animal así como con las camadas indeseadas.
