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Tous brinda con una cerveza artesanal que también sabe a naranja

D'Orange, la nueva empresa de los antiguos propietarios de El Águila, ya produce 10.000 litros al mes - Además de la bebida de cítricos, también elabora la Reserva Imperial y otra variedad que añade miel y romero

Tous brinda con una cerveza artesanal que también sabe a naranja

Tous se caracteriza por el pantano, por tener uno de los términos municipales más grandes de la provincia y desde hace unos meses, por fabricar la cerveza d'Orange. Esta «birra», perteneciente a la familia de los Comenge, antiguos propietarios de El Águila, fermenta en cantidades limitadas y no solo la elaboran para vender, sino también para disfrutar. Su filosofía se basa en entender que la cerveza es mucho más que un refresco y se esfuerzan por ofrecer un producto natural con una personalidad muy definida. Se distinguen por su cuidada elaboración y por buscar en la pureza de la materia prima el secreto de su calidad y encanto. Representan un producto exclusivo a precio asequible y en la boca se presenta fresca, delicada y con notas cítricas. Y es que una «rubia» elaborada en la comarca de la Ribera no podía obviar el toque de las naranjas. «Producimos alrededor de 10.000 litros al mes, aunque necesitamos casi dos para completar el proceso entre fabricación, maduración y envasado. Es una cerveza de autor que está viva», explicó Jordi Boluda, técnico encargado de la preparación.

La ausencia del proceso de pasteurización en su elaboración, un tratamiento térmico utilizado en líquidos para la eliminación de bacterias, condiciona su durabilidad y exige condiciones estables para mantener su calidad. Ni mucho viaje, ni mucho calor, ni mucho tiempo en la estantería. En cualquier caso, las artesanas no suelen salir más allá de la provincia o la comunidad autónoma, un factor que potencia una relación íntima entre artesano y bebedor, capaz de fidelizar en el tiempo. «Omitiendo este paso provoca que la fecha de caducidad sea más corta. No obstante, una buena «birra» tiene que ser visual, cristalina, la espuma tiene que estar consistente y el trago tiene que ser largo. Es aquella que por ella misma te pide volver a tomarla y en este caso, se cumplen todas esas condiciones», aseguró Boluda.

Además de la d'Orange, en la que utilizan la piel de las naranjas para darle un toque diferente, también fabrican la Reserva Imperial, que tiene más grados alcohólicos y color, y la Aitana, que debe su nombre a la sierra alicantina y para recordar a la montaña, se le añade miel, romero y otras hierbas de la zona. Pese a contar con tres buenas «rubias», no buscan competir contra las gigantes multinacionales que atesoran la mayor parte de las marcas en España. Su público se concentra sobre todo en los restaurantes y tiendas gourmet. De hecho, en los últimos meses están recibiendo cientos de visitas gracias a un convenio con el mesón de Tous. Autobuses llenos hasta la bandera que aprovechan su visita al municipio para degustar los mejores platos locales y vivir una experiencia singular con un particular maridaje. Y es que han convertido su centro en un lugar de cultura cervecera con barra y varios grifos. Una especie de bar improvisado con unas cuantas mesas y, a su lado, la pequeña fábrica, a la vista del público, donde se elabora el preciado líquido. «En nuestro país no se le da valor. Todavía queda mucho trabajo por delante. La gente no sabe deleitarse todavía de una buena y elaborada cerveza», declaró el técnico.

Cultura cervecera

Frente al vino, una «birra» ha padecido siempre una irremediable inferioridad. El uno cuenta con establecimientos propios, como las enotecas, pero la otra todavía está en proceso de poder tener un santuario dedicado a su figura. Saber de vinos se considera atributo de distinción, aunque saber de cerveza es mucho más complicado. Sin embargo, los pequeños brotes de trigo y de cebada que han empezado a germinar en Tous empieza a dar sus frutos.

La experiencia de la familia Comenge ofrece a la empresa una visión mucho más completa que en otros casos donde los productores apenas cuentan con conocimientos en la materia. Y es que la gestión por parte de generaciones anteriores, de El Águila (1939-1984), la cerveza más consumida en España entre el desarrollismo y finales de los años 80 por encima de Mahou, San Miguel y Damm, ha provocado que se vuelvan a establecer en el mundo de las bebidas. Esta vez afrontan el reto de que d'Orange sea valorada como lo que es, una cerveza de autor, elaborada desde la misma dedicación y pasión que caracteriza a los mejores cocineros.

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