? La aproximación de cabras montesas a zonas pobladas suele coincidir también con épocas de sequía. La falta de agua y alimento en las montañas propicia que bajen en busca de sustento y, en el caso de Sumacàrcer, el casco urbano se cruza en su camino entre la montaña y el cauce del Xúquer. Con todo, la presencia de esta fauna salvaje en zonas habitadas, ya sea en el caso de Sumacàrcer o el del colegio de Antella, evidencia una abundante presencia de ejemplares en estas montañas.

Cabe recordar que, como ya informó Levante-EMV el pasado miércoles, la población de jabalíes y conejos también se ha multiplicado en la Ribera en los los últimos años, lo que ha provocado repetidas quejas de los agricultores por las quejas que estos animales provocan en sus cultivos.