El PP de la Ribera Alta ha criticado la gestión «ineficaz y obsoleta» del Consorcio de Residuos Ribera-Valldigna y ha reprochado la «falta de un criterio claro en el modelo de vertedero», así como la ausencia de decisiciones sobre el emplazamiento del mismo, que está encareciendo el coste del servicio ya que, según recuerdan los populares, el propio consorcio ha reconocido que el transporte del rechazo genera un desembolso anual de 2,7 millones de euros.
La dirección comarcal del PP señala en un comunicado que uno de los principales temas que tenía que afrontar el nuevo gobierno del consorcio era la construcción de esta planta «aprobada con anterioridad» y señala que «los mismos que ostentan hoy la responsabilidad de gobierno pusieron todo tipo de trabas contra el anterior emplazamiento para no llegar a alcanzar el consenso deseado, contribuyendo a la caótica situación actual que repercute negativamente en la economía de los usuarios al incrementar de forma alarmante la tasa de residuos».
Por otra parte, el PP critica que el presidente del consorcio, Salvador Montañana, haya incumplido como alcalde «todos los plazos» que él mismo había fijado para dar una respuesta sobre la aceptación o no del vertedero en Guadassuar.
