«La planta por sí misma no es perjudicial, el problema es el uso que se pueda hacer de ella». Expertos en jardinería consultados ayer por Levante-EMV coincidieron en señalar que la presencia de plantas de burundanga en el cementerio de Alzira no representa en principio un riesgo, incluso en caso de entrar en contacto con ella, ya que la obtención de la escopolamina o burundanga, una droga que anula la voluntad y que está siendo utilizada con fines delictivos -tanto para agresiones sexuales como para robos a personas mayores, especialmente-, requiere de un complejo proceso que no está al alcance de cualquiera. Otras fuentes señalan que, pese a no tratarse de un planta autóctona, su presencia es bastante común. El porte que puede alcanzar y las llamativas flores -varía el color en función de la especie- provoca que se utilice como planta ornamental.

Como ayer adelantó este periódico en exclusiva, la Policía Local de Alzira ha dado parte a la comisaría de la presencia de dos plantas de burundanga -no se descarta que pueda haber más- en zonas ajardinadas del cementerio después de que una especialista en plantas ornamentales alertara de su presecia. Por el tamaño se inuye que llevan ya algún tiempo.

La planta se caracteriza por unas llamativas flores acampanadas de color blanco que, al parecer, corresponden a la especie con el principio activo más puro para la elaboración de burundanga.

La escopolamina, conocida popularmente como burundanga, se encuentra en el fruto de diferentes plantas de la familia de las solanáceas y del género datura que crecen de forma espontánea en muchos lugares, también en las cunetas de las carreteras. Es una sustancia que genera delirios, desorientación y alucinaciones y, en grandes dosis, puede incluso causar la muerte. Su consumo anula la voluntad, por lo que se está empleando con fines delictivos provocando una ingestión involuntaria, normalmente diluida en la bebida, de forma que la persona intoxicada con esta sustancia narcótica no sólo acata todo tipo de órdenes, sino que pasados los efectos no recuerda nada de lo sucedido.