El alcalde de Alzira, Diego Gómez, ya se ha puesto en contacto con los responsables de la Comisaría de la Policía Nacional para prevenir una posible escalada de tensión entre ultras, ya que teme que aprovechen el marco de las fiestas de Sant Bernat para causar algún tipo de incidente. La aparición desde hace más de un año de abundantes pintadas en el municipios realizadas por un presunto grupo de filiación nazi y el reciente reparto de un panfleto que identifica con nombre y apellidos -además de con fotografías- a los supuestos autores de los actos vandálicos ha llevado la problemática a un nuevo escenario. Y el primer edil quiere que se actúe con determinación: «Hemos tratado el tema con los cuerpos policiales y esperamos que no ocurra nada grave. También se evaluó esta problemática en concreto con el mundo de las fallas. El único camino es la tolerancia, eso hay que dejarlo claro».
Por ello, reclama una mayor colaboración ciudadana para identificar a los culpables: «Nosotros ya hemos acudido a la Fiscalía por el tema de las pintadas y no descartamos poner una nueva denuncia. Lo que pedimos es que si actúan contra una residencia privada también se presente una denuncia, ya que reforzaría nuestras reclamaciones. Lo ideal sería pillar in fraganti a quien ensucia los espacios públicos de nuestro municipio y otros de la Ribera con mensajes de odio».
Gómez enlaza la aparición de los lemas -«rojos no» es uno de los más repetidos- con la llegada de Compromís al gobierno local: «En Silla no se hacen este tipo de actos vandálicos, por ejemplo, y por algo será. Son mensajes que evocan su visión política, está claro que no están de acuerdo con el nuevo gobierno municipal». Por ello, el primer edil apuesta por reunirse con los alcaldes de otras ciudades afectadas -Carcaixent, Algemesí, etc.- y vertebrar algún tipo de respuesta institucional: «Parece ser que el grupo nazi tiene su núcleo en Alzira, pero también hay residentes en Carcaixent, por ejemplo. Es un tema que nos afecta a todos y que llama a una actuación conjunta». Por último, anunció la puesta en marcha de una campaña a favor de la tolerancia en los centros educativos a partir de septiembre: «La educación es clave al abordar este tema. Debemos luchar por erradicar este tipo de actitudes».
