Juan y Ana -no son sus nombres reales, prefieren el anonimato- viven todo el año en un diseminado de la zona del Plà de Carcaixent, una parcela apartada de la localidad donde el suministro de agua depende del pozo de Sant Vicent. No es un caudal apto para consumo humano, pero sí utilizan el agua a diario para poder ejecutar tareas de la casa como lavar los platos y el suelo, además de ducharse. Sin embargo, una avería registrada durante la tarde del pasado viernes los ha dejado sin suministro en un plena ola de calor durante cuatro días, lo que les ha obligado a bajar al municipio para realizar sus tareas de aseo personal y cargar con todas las garrafas de agua que cupieran en su coche. Han sido cuatro días sin servicio corriente en unas jornadas marcadas por notables aumentos del mercurio que causaron noches tropicales, lo que ha maximizado las consecuencias.
«Nosotros vivimos con nuestra hija pequeña, dos perros y un gato y no disponer del servicio nos ocasiona grandes molestias. Además, tampoco podemos regar las plantas... lo cierto es que soportar esta situación con la que está cayendo no tiene nombre, la verdad, y más hacerlo durante todo este tiempo», relataron los afectados.
Algunos de los edificios sin caudal procedente del pozo sí han podido sobrevivir gracias a los depósitos de almacenaje de agua. Además, muchos dueños de inmuebles de la zona son residentes ocasionales: «Nosotros no tenemos otra casa, vivimos aquí y lo hemos pasado peor. Nuestros vecinos sí disponen de un aljibe pero creo que se les está acabando ya el agua y van a verse en nada en nuestra tesitura», expusieron.
A su vez, estimaron que la situación se sufre en cerca de cien chalés, que dependen del pozo averiado: «Estamos estudiando la posibilidad de denunciar por daños y perjuicios, ya que han sido muchos días. Nos hemos puesto en contacto con los responsables del pozo y nos han dicho que mañana -hoy para el lector- estaría todo solucionado si no hay nuevos contratiempos», apuntaron.
El matrimonio baja cada día a ducharse a casa de unos familiares y aprovecha el recorrido para cargar las garrafas: «No es lo ideal y menos con el notable calor que sufrimos. A una malas podríamos ir al polideportivo de Carcaixent, pero ya sería una situación límite. Tenemos una vecinos de fuera y creo que han tenido que hacerlo», argumentaron.
El variador y la bomba
Este diario se puso ayer en contacto con los responsables del suministro de agua. Confirmaron que la avería se produjo el pasado viernes por la tarde ante una bajada de tensión, que afectó al variador y la bomba. Apuntaron que, en teoría, el suministro debería volver durante la jornada de hoy a la zona del Plà, aunque descartaron dar cifras de damnificados por la situación.
Por último, los afectados apuntaron que en otros pozos hay más previsión: «He comentado lo ocurrido con conocidos y me han dicho que hay pozos que tienen hasta tres bombas. Así, si se avería una tienen repuesto».
