Circular bajo los efectos del alcohol pone en peligro al resto de conductores y las complicaciones aumentan si encima lo haces sin respetar las normativas vigentes. Es lo que ocurrió el pasado martes por la noche en la localidad de Alginet, cuando una patrulla de la Policía Local detuvo a un hombre de 37 años de edad residente en Carlet a bordo de un ciclomotor, que presentaba síntomas de estar ebrio. Tras la pertinente prueba para esclarecer la presencia de alcohol en la sangre, el detenido dio la tasa de 0'80 miligramos, siendo la estipulada para considerar su conducta como delito contra la seguridad vial la marca de 0'60 mg/l , según las normativas actuales.

Circulaba, además, con el permiso de conducir retirado por una sentencia judicial firme, tras haber protagonizado otro positivo por alcoholemia en el mes de enero del presente ejercicio. De hecho, ya fue la Policía Local de Alginet la que lo detuvo en la anterior ocasión que dio positivo.

Además de los dos presuntos delitos que se le imputan -conducir con el carnet retirado y dar positivo en el test de alcoholemia-, el ciclomotor que conducía por las calles de Alginet carecía de seguro de responsabilidad civil obligatorio para circular y la inspección técnica (ITV) estaba caducada desde el año 2011.

El ciclomotor fue inmovilizado en el acto por los agentes y el conductor se enfrenta a la pena de ser privado de conducir vehículos a motor de uno a cuatro años, a una multa por determinar y, además, a una pena de 3 a 6 meses de prisión por los delitos cometidos.