Favara ha recuperado una parte de su esencia con la reapertura de uno de los edificios indispensables en toda población: la Casa de la Cultura. El inmueble, con tres décadas de antigüedad. ha recibido un cuidadoso lavado de cara para lucir como nuevo.
Se ha realizado una reforma integral del edificio que contempla: la ampliación del escenario, la adecuación de los camerinos, la adaptación de los baños en base a la normativa de accesibilidad y de aforo, la protección contra el fuego de la estructura metálica, la instalación de climatización por conductos, una red de alcantarillado nueva, una instalación eléctrica nueva, la preinstalación de iluminación escénica y megafonía, así como mejoras de accesibilidad en el edificio y en su acústica. El ejecutivo local siempre ha defendido que el inmueble «necesitaba adaptarse a los nuevos tiempos y a las nuevas necesidades, tanto estéticas como funcionales y de seguridad». Esta primera fase ha tenido un coste de unos 195.000 euros, financiados con fondos propios. Ahora, en una segunda fase, se prevé la finalización del equipamiento con el mobiliario, la máquina de climatización, los equipos de luz, imagen y sonido, y telón.
La remodelación de la Casa de la Cultura fue un tema que creó discrepancias en el seno del ayuntamiento. Mientras que el equipo de gobierno apostaba por aprovechar la estructura ya existente y reformar aquellos puntos y zonas que presentaban deficiencias, el Partido Popular (en la oposición) abogaba por la construcción de un nuevo inmueble.
