Una quincena de colectivos ecologistas se han unido en una coordinadora comarcal para que su voz llegue donde antes no podía. Los colectivos, muchos de ámbito local mientras que otros son muy específicos, buscarán con su cohesión ser un mecanismo de presión que defienda los intereses del medio ambiente en la Ribera.
Muchas asociaciones aseguraron sentirse ninguneadas por parte de la administración. «El objetivo principal es reforzarnos mutuamente y procurar que ciudadanos, ayuntamientos y consellerias hagan más caso a las propuestas de los grupos ecologistas. Otro objetivo implícito es conseguir que haya, al menos, un grupo ecologista en cada pueblo», explicó Pedro Domínguez, activista de La Ribera en Bici.
Froman parte de la coordinadora Xúquer Viu, Associació Muntanyeta dels Sants Acció Ecologista-Agró de Sueca, Plataforma Ciutadana el Magre, VACIF d'Alzira, La Llavor, Amics de La Murta, Voluntaris Mediambientals de Corbera, Associació Mediambiental d'Aigües Vives, el Jardinet de l'Estació, La Mitja Galta de Manuel, Grup d'Acció Mediambiental del Marquesat, Anoktua, Comissió Ecologista de l'Aplec de La Ribera, GPF Muntanyes de Carcaixent, Dynamo y La Ribera en Bici-Ecologistes en Acció.
«Los colectivos más antiguos se presentaron con cierto escepticismo porque son los mismos que llevan reivindicando lo mismo durante años», aseguró Jaume Puchalt, de Plataforma Ciutadana el Magre, que continuó: «Los más jóvenes llegamos con la impotencia de que no se nos escucha. Pero fue un encuentro bonito porque descubrimos asociaciones que ni siquiera sabíamos que existían».
Entre sus preocupaciones destacan los problemas que adolecen los ríos de la comarca, como el Xúquer, el Albaida y el Magre, aunque también la promoción de la movilidad sostenible, las vías verdes o la reducción de emisiones contaminantes.
Según explicó Puchalt, la creación de la coordinadora comarcal permitirá «unificar voluntades y lanzar mensajes más potentes» del mismo modo que servirá para que los grupos ecologistas más jóvenes aprendan de los veteranos. Asimismo, el trabajo conjunto evitará que se solapen actividades medioambientales en la comarca.
«Buscamos ser muchos y tener capacidad de presionar, ser un agente social más y que se nos tenga en cuenta. Aunque en la actualidad muchos ayuntamientos tienen una mayor sensibilidad medioambiental, también reciben muchas presiones externas. Así que tenemos que ser su apoyo en la toma de decisiones ecologistas», apuntó Puchalt.
