La Policía Local de Cullera 'cazó' el pasado jueves 1 de noviembre a un motorista tras causar un accidente de tráfico en la localidad cuando conducía presuntamente bajo los efectos del alcohol y de ansiolíticos. Pero no solo eso, el citado conductor acumulaba cinco condenas firmes de retirada del carnet, la última todavía en vigor.

La sorpresa fue todavía mayúscula cuando los agentes descubrieron que la motocicleta que llevaba en el momento de causar el siniestro, valorada en 14.000 euros, había sido adquirida hacía poco tiempo, es decir, mientras la retirada del permiso estaba vigente.

Los hechos sucedieron alrededor de las 13 horas en el camino de la Coma, ubicado en la pedanía del Brosquil. El motorista colisionó contra un coche parado a la entrada de una casa de campo y se causó heridas graves, aunque su vida no corre peligro. Afortunadamente, ninguna otra persona se vio afectada.

Imputación de dos delitos

Los agentes le imputan ahora dos delitos contra la seguridad vial, uno por conducir bebido y bajo los efectos de la medicación y otro por circular con el permiso retirado. El caso ha sido puesto en manos del juzgado de instrucción número 5 de Sueca.

Se da la circunstancia de que el motorista, residente en la localidad vecina de Tavernes de la Valldigna, llevaba prácticamente desde el año 2011 acumulando condenas firmes de retirada del carnet por los mismos motivos que le llevan ahora nuevamente ante la justicia.

La última condena le retiró el carnet durante un período de dos años y cinco meses. Sin embargo, este cúmulo de sentencias condenatorias no fue óbice para que el reincidente perseverará en su actitud.

La moto ha sido retenida y puesta a disposición judicial para evitar que pueda volver a hacer uso de la misma y reincida, explican fuentes de la Policía Local de Cullera