Los perros son bienvenidos en la Residencia y Centro de Día La Vila de Almussafes.Participan en un proyecto pionero en la comarca que busca sensibilizar a las personas mayores a través de terapias de estimulación con animales de compañía. Lucky Protectora de Animales es la que aporta a Noa, una cariñosa perra de raza bretona de once años de edad que enamora a quien se acerca a ella.

La iniciativa, que aúna a la Concejalía de Mayores, a la dirección de la residencia y a la protectora, trabaja la estimulación afectiva y psicológica de los usuarios del centro geriátrico. La edil Paqui Oliver destaca que los animales «aportan grandes beneficios desde el punto de vista sensorial».

Carlos Carbonell, secretario de Lucky, explica que a través del contacto y los juegos con los animales de compañía «se puede mejorar la calidad de vida del colectivo de mayores». De hecho, a la recepción de cariño y a la sensación de tener compañía, se suman los recuerdos, las emociones y las experiencias que se despiertan con la terapia.

Lazos afectivos recíprocos

El encuentro inaugural, celebrado el sábado, tuvo una respuesta muy positiva por parte de las participantes, muchas de ellas afectadas por enfermedades degenerativas. Todas interactuaron con Noa, la perrita protagonista del programa, y se crearon lazos afectivos recíprocos. Beatriz Díaz, presidenta de Lucky, muestra su satisfacción por la felicidad que ha despertado la iniciativa, un hecho que les anima a ampliar el número de actividades específicas de esta terapia de estimulación.

El presidente de la asociación de jubilados, José Doria, quien también participó en la jornada inaugural del programa, ha constatado el acierto del cursillo.«Es muy beneficioso para la gente mayor tener contacto con animales, porque la mayoría de nosotros los han tenido en el pasado, principalmente para las labores del campo, y de ahí su rápido encariñamiento con ellos y el hecho de que surjan de manera espontánea recuerdos de antaño», comenta Doria

Para Julia Grau, directora de la residencia, apunta que este tipo de iniciativas «son muy útiles para los usuarios y de ahí que haya entrado a formar parte del programa anual de actividades que desarrollamos en el centro geriátrico».