El Campeonato del Mundo de Superbikes contaba este año con protagonismo ribereño. Además de la participación del llombaíno Xavi Forés, muchos desconocen que una escudería de Algemesí se daba cita por primera vez en la historia, siendo el único equipo español. El Orelac Racing VerdNatura confió en el argentino «Tati» Mercado para su debut y los resultados parece haber complacido, tanto a nivel interno como a la exigente organización de un campeonato en el que se acostumbra a ver a pilotos y equipos desaparecer como la polvorilla. Con la subida a Superbikes, el Orelac (con el empresario José Calero a la cabeza) daba un paso adelante después de muchos años en categorías como Superport, con Nacho Calero como piloto. «La temporada ha sido bastante positiva para la escudería y para el piloto. La organización ha valorado muy positivamente nuestra campaña. Empezamos de forma muy precipitada porque recibimos con mucho retraso el material de Kawasaki. El tiempo se nos echó encima pero con mucho trabajo empezamos el campeonato en Australia con muchas credenciales. A medida que ha ido avanzando el campeonato, el equipo ha ido creciendo y evolucionando muy rápido. Hay muchas horas de trabajo detrás de ese avance. En la Superbike todo era nuevo», argumenta Calero.
«Hemos dado la talla y tanto piloto como moto han estado a la altura del Mundial, como ha podido ver todo el mundo que es aficionado a las motos. Los resultados nos avalan. Podemos decir que lo hemos hecho muy bien. Nos da fuerzas para seguir adelante porque ya nadie duda que somos un equipo válido para el Mundial. Es por ello que necesitamos más ayuda para continuar avanzando. Se ha conseguido crear un equipo muy competitivo», opina el empresario de Algemesí, quien añade: «También estamos contentos con Mercado, ya que creemos que la unión ha sido positiva. Se ha logrado posiciones de mucho mérito. Él es un gran piloto y por eso sólo podemos que exigirle para ir a mejor, a buscar siempre los mejores resultados. Él ha mimado mucho al equipo y tiene filosofía de Orelac. Es un gran talento y queremos que continúe con nosotros. En un año ha aportado cosas muy positivas».
«Esto no para»
Respecto a la temporada siguiente, empezaron a planificarla incluso antes de que acabase la actual campaña, que escuchó el pitido final con la carrera de Qatar de octubre. «Esto no para nunca. No queremos retrasos y hemos empezado a pedir material para trabajar duro. Kawasaki y la organización apuestan con firmeza por el Orelac. Algunas cosas cambian en cuento al motor y Kawasaki quiere estar con nosotros y ser una moto competitiva frente a Ducati, Aprilia u Honda. Con esta ilusión empezamos. Podemos estar entre los diez primeros, dando guerra a los equipos oficiales y a los pilotos de primera línea. Hemos aprendido mucho pero todo lo que nos ha ocurrido ha sido útil. El potencial para el año que viene es mucho mayor, prácticamente el doble. Vamos creciendo y la gente confía más en nosotros. Eso te hace crecer exponencialmente. Vamos a apostar fuerte», arguye Calero, quien aduce: «Hemos sido la escudería novata del campeonato y eso conlleva que se padezca en un campeonato que es muy duro. Tenemos mucha experiencia detrás pero siempre es complicado empezar un nuevo proyecto».
