La Festa de la Mare de Déu de la Salut de Algemesí, las Fallas y... ya es cuestión de días saber si la tamborada de Alzira se convierte en la tercera manifestación cultural de la Ribera que logra el reconocimiento como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humana. Los casi 9.000 kilómetros que separan Alzira de la isla Mauricio no impedirán que el latir de los tambores llegue, aunque sea de forma metafórica, a esta pequeña república del Índico. Allí arranca mañana lunes la reunión anual del comité intergubernamental de salvaguardia del patrimonio cultural inmaterial que debe pronunciarse sobre la candidatura de las tamboradas que agrupa a diecisiete municipios españoles, entre los que se encuentran dos valencianos, Alzira y l'Alcora, de cinco Comunidades Autónomas diferentes.
Cuarenta manifestaciones culturales de todo el mundo aspiran a entrar en la Lista Representativa del Patrimonio Inmaterial de la Unesco durante esta cumbre que se prolongará hasta el sábado 2 de diciembre.
La vicealcaldesa de Alzira y concejal Fiestas, Isabel Aguilar, y el presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de la Semana Santa, Vicent Fábregues, se muestran optimistas y confían en que las noticias que lleguen la próxima semana de la Isla Mauricio sean positivas y motivo de una celebración «sonada».
