El sonido de los tambores resonó ayer a la puerta del ayuntamiento con más fuerza que nunca. No fueron muchos aficionados a esta primera celebración improsivada, aunque los redobles de tambores y timbales querían transmitir un mensaje al mundo: «Som Patrimoni». La celebración oficial tendrá lugar el próximo 28 de diciembre con la inauguración de una escultura dedicada al tambor y la rompida de la hora. La tamborada de Alzira es una de las más jóvenes de las que integran la candidatura, se creó en 1992 vinculada a la Semana Santa, una celebración de la que existe constancia documental desde 1539, según destaca la candidatura. El tambor ha ganado mucho protagonismo en los últimos años y la Junta de Cofradías estima en un millar los tambores existentes en la ciudad.