Un año más, y coincidiendo con el final del ejercicio, Cullera salió a la calle para celebrar su carrera más divertida del año, la San Silvestre. Divididos en cuatro categorías (prebenjamín, benjamín, infantil y cadete), y categoría absoluta, los más de 360 participantes inscritos en esta prueba iniciaron su recorrido a partir de las 18 horas de forma escalonada y en diferentes circuitos habilitados por la Concejalía de Deportes del Ayuntamiento de Cullera,que ha convertido el acto en una tradición. Los únicos requisitos para poder tomar parte en esta última prueba del año en la localidad de la Ribera Baixa era ir disfrazado y aportar un euro para causas solidarias. Con la recaudación de las inscripciones se apoya a la Asociación Española de la Lucha contra el Cáncer y a la Asociación Española para la investigación y ayudas al síndrome de Wolfram.
Muchos de los clubes deportivos de la ciudad quisieron participar en el acontecimiento para cerrar el año con deporte. Otras localidades de la Ribera (caso por ejemplo de Sumacàrcer) también celebraron San Silvestres.
