Siempre es interesante conocer los hechos que protagonizaron nuestros antepasados. De eso trata el número dos de «Algezira Xúcar», una publicación que recoge pasajes históricos de nuestra Alzira y de los pueblos de la Ribera y que el próximo viernes, 25 de enero se presenta, a las 19,30 horas, en los salones del Círculo Alcireño-La Gallera.
El primer número salió a la luz en julio del pasado año y se presentó en el salón dorado del antiguo casino. Un entusiasta grupo de historiadores de Alzira y su comarca, con inquietudes por difundir el pasado y el quehacer de sus moradores, han formado un equipo para dar a conocer nuestra historia, patrimonio, costumbres y tradiciones.
El equipo, bajo la dirección de Aureliano Lairón, archivero municipal y cronista oficial, está formado por un consejo de redacción integrado por J esús Marrodán, Vicent Garés, Ivan Canet, Salvador Iñigo, Bernat Montagud y Alfonso Rovira, que ha sido el último en incorporarse. De la edición se ocupa la Asociación Sociocultural Alteris. Colaboran además en este número de la revista Josep Lacreu, Marián Navarro, Francisco Gallardo, Jordi Giménez como asesor lingüístico y los fotógrafos José Carrillo, Miguel Ángel Gil, Vicent M. Pastor, Riberaexpress, el Seis Doble y el que firma esta crónica.
A lo largo de las 148 páginas del segundo número se recoge un listado de las noticias más relevantes del año, desde julio a diciembre de 2018, así como las efemérides más destacadas y una galería fotográfica de instantáneas que el fotógrafo Lucien Roisin realizó en Alzira en los años 30 del pasado siglo.
Además, la publicación inserta artículos sobre temas históricos sobre el poblado de la Edad de Bronce en la Muntanya Assolada, de Bernat Martí, Rosa Enguix y María Jesús de Pedro o sobre las cuevas sepulcrales de Alzira, entre las que se encuentran la Cova dels Gats, la de les Aranyes y la dels Tres Cranis, a cargo de María Gracia Toledo. También se trata el legado del cardenal Jaume Serra en un artículo de Xavier Úbeda. Tomás Peris Albentosa aborda la gestión de la Séquia Reial del Xúquer y de la relación de los priores del monasterio de la Murta habla Aureliano Lairón. También se tratan otros aspectos de la historia alcireña en artículos como «Alzira durant la dictadura de Primo de Rivera», de J ennifer Santapau; «Teodoro Andreu», de Mónica Ibáñez; «L'obra de Leonardo Borrás», de Bernat Montagud; «Patrimoni arquitectònic d'Alzira», de Miguel Vila; «El grups de Missió Rescat d'Alzira», de Norbert Blasco o «La biblioteca municipal d'Alzira», de David Perpiñá.
El libro se completa con un artículo sobre la toponimia alcireña de Rubén Pastor; otro sobre los apellido alcireños Sifre,una tira cómica de Pep Ripoll y otras secciones como «Alzira vista desde el archivo»; «Hemeroteca» en que se recuerda, por parte del profesor Fernando Rodríguez, al semanaTambién se abordan temas de geografía, agricultura y medio ambiente como el artículo «La font de la Murta y el seu entorn», a cargo de Salvador Iñigo; la música con «Alzira, ópera de Verdi», del compositor José Grau; el arte con un artículo sobre la artista local Isabel Matoses realizado por Darío Valbuena; la literatura en «Alrededor de la condesa de Alzira», de Carmen María Verdager o sobre economía sobre el Grupo empresarial Martínez Cano.
Asimismo, aparecen temas tan curiosos como «Alzira vista por los cronistas de la Ribera», de Enric Mut, cronista de Guadassuar; las fiestas tradiciones y costumbres en los artículos de María Amparo Olivares y Edgar Talens o sobre la pilota valenciana en Alzira, elaborado por Andrés Fraile. Varios expertos contestan preguntas sobre la construcción del cementerio municipal o dónde se halla la lápida de Salvador Santamaría, fallecido en la guerra de Filipinas, entre otras curiosidades como "La «otra» Alcira en la provincia argentina de Córdoba.
Finalmente se recogen novedades editoriales, como «El convento de Aguas Vivas: historia, economía, guerra y pleitos», del profesor Eugenio García Almiñana, la historia de la reganyà, de Vicent Garés, «Dones amb veu»,de la profesora Pura Santacreu, «Lo que Alzira perdió en el siglo XX", de Alfonso Rovira y «Antonio Ballester Vilaseca. Obras en Alzira», de Bernat Montagud.
