La Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente ha atendido la petición del Ayuntamiento de Algemesí para proteger el bosque de ribera que se conserva en la confluencia del río Magro con el Xúquer con la declaración como Paraje Natural Municipal de una superficie de unos 75.000 metros cuadrados que alberga un ecosistema típico de ribera tanto por la flora como la fauna allí presente. La Generalitat publicó ayer la orden por la que se inicia el procedimiento para asignar esta protección a unos terrenos que en parte se encuentran en la zona LIC (Lugar de Interés Comunitario) del Xúquer y que será el primer tramo del río que se blinda con la declaración como Paraje Natural Municipal, una figura de la que ya disfrutan, por ejemplo, los Ullals del río Verde.
El nombre con el que se ha bautizado oficialmente al paraje, Bosc de Ribera, es lo suficientemente explícito del valor que se pretende salvaguardar y, según explicó ayer el concejal de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Algemesí, Pau Montalvá, el objetivo es mantener el aspecto natural de esta orilla y su actual ecosistema. Los terrenos se encuentran en la orilla derecha del Magro. «En la Xopera tenemos dos zonas, una recreativa -la Xopera en sí- y otra más natural para la que pedimos esta figura de protección porque queremos que ese espacio continúe lo menos antropizado posible», indicó Montalvá, mientras recordaba que ya se han realizado trabajos de eliminación de especies invasoras y se han introducido otras endémicas «con un resultado más que aceptable». El edil señaló como ejemplo que para evitar que se altere el actual equilibrio se han instalado señales con la prohibición de hacer pic-nic.
Estudios científicos
La orden publicada ayer en el Diario Oficial de la Comunitat Valenciana (DOCV) destaca que el paraje Bosc de Ribera juega un papel «importante» desde el punto de vista paisajístico «dado el gran contraste» con el paisaje totalmente antropizado que lo rodea y subraya que, debido a su ubicación, riqueza natural, riqueza florística y de comunidades vegetales y accesibilidad, «ofrece posibilidades para la realización en su entorno de actividades y estudios científicos, de educación ambiental y de turismo rural».
La orden firmada por la consellera de Agricultura y Medio Ambiente, Elena Cebrián, establece que el ámbito inicial del nuevo Paraje Natural Municipal «podrá ser objeto de ampliación durante el procedimiento de declaración del paisaje protegido, a propuesta del ayuntamiento afectado territorialmente por la mencionada ampliación».
La descripción del paraje destaca que la vegetación predominante la constituye una buena representación del ecosistema del bosque de ribera como el chopo blanco, el negro, el sauce, el almez, fresnos, el tamariz, zarzas, adelfas, lirios amarillos y narcisos silvestres, así como especies acuáticas como la enea, la lenteja de agua, el junco, el carrizo y la grama de agua.
