Fallas y paellas son el binomio valenciano por excelencia. Una de los actos que marca la cercanía de las fiestas josefinas en Cullera es el tradicional concurso de paellas, que reunió ayer a varios miles de personas en el recinto municipal de la Calle Enrique Chulio. La comisión la Bega fue la que preparó la mejor receta mientras que Plaça d'Espanya se llevó el premio a la mejor decoración.

Pero más allá del cierto pique que provocan estos eventos, lo más importante del concurso fue el buen ambiente y la hermandad que se creó entre los integrantes de las 15 comisiones y la Junta Local Fallera. Más de treinta años avalan la celebración de este certamen, que este año contó con un componente solidario, ya que con cada degustación se podía aportar una cantidad simbólica que irá destinada íntegramente a la Asociación de Disminuidos Físicos y Psíquicos Baladre.

En las jornadas anteriores al concurso, los miembros de la Junta Local se encargaron del reparto de los ingredientes a las diferentes fallas, para que éstas pudiesen prepararlas. En total se repartieron, según la propia JLFC, arreglos para confeccionar sobre 2.000 raciones de paella. Lo que sumado a los curiosos que se acercaron a la fiesta que se organiza alrededor de este evento, lo convirtió en un certamen que congregó a unos 2.500 participantes.

El jurado entregó tres premios a la cocción y otros tantos la decoración, que se repartieron, curiosamente, las mismas fallas, aunque en distintas posiciones. En la primera categoría se impuso la Bega, seguida por Alboraia y Plaça Espanya, que quedó en tercera posición. En la segunda, fue Plaça Espanya la comisión que elaboró la paella mejor decorada. Le siguieron la Bega y Alboraia.

Después de la entrega de los premios y banderines acreditativos a las comisiones vencedoras, la Junta Local Fallera de Cullera programó una actuación especial con la instalación de una discomóvil que contó con la participación especial de los Dj's Nando Palau y Camarasa.