Cullera volvió a unir fallas y deporte en una celebración más del campeonato de fútbol que todos los años reúne a buena parte de los representantes de las diferentes comisiones. Bajo un ambiente propio de las grandes citas se fueron sucediendo los partidos con gran competitividad pero sin olvidar el carácter festivo que envolvió toda la celebración. Por noveno año consecutivo se proclamó ganador de las 24 horas de fútbol sala la falla del Passeig Mercat, quedando en segunda posición la falla la Taüt y sumando el bronce la comisión de Sant Antoni de la Mar.

Es usual que las fiestas josefinas se vean complementadas de múltiples actividades que se expanden por mundos como la cultura, el ocio o el deporte.