? La ausencia de lluvias está obligando a los agricultores a regar en una época en la que en condiciones normales no lo harían, lo que aumenta los gastos de producción y también la preocupación al consumir reservas que pueden hacer mucha falta en verano. «Intentamos aguantar todo lo que podemos pero los agricultores están nerviosos y hay mucha gente regando. Unos tienen plantones, otros naranjas de segunda temporada y todos los que tienen naranja están regando», comentó el presidente de la Real Acequia Escalona, Emilio González, mientras señalaba que el poniente ha aumentado esa necesidad de regar. González admitió que la situación «pinta mal» si no llueve ya que el agua que se está utilizando «puede hacer falta en verano».
