Un hombre falleció ayer en el incendio de su vivienda de Villanueva de Castellón. El fuego se originó a primera hora de la tarde por motivos que no se han concretado todavía, si bien las primeras hipótesis que se barajan apuntan a causas fortuitas. Un agente de la Policía Local logró rescatar con vida a una familiar del fallecido y, tras ello, tuvo que ser ingresado por inhalación de humo.

El incendio se inició, aproximadamente, entre las 14,00 y las 15,00 horas en la primera planta de una vivienda unifamiliar situada en el número 28 de la calle Pérez Cabello de Villanueva de Castellón, según detallaron fuentes del Consorcio Provincial de Bomberos.

Fuentes oficiales confirmaron que el aviso llegó a la Policía Local a primera hora de la tarde. Las autoridades municipales fueron, por tanto, las primeras en personarse en el lugar del suceso. A su llegada, los agentes se encontraron la puerta del inmueble abierta y una densa humareda, que imposibilitaba tanto la visión como la respiración. De hecho, ni siquiera se podían ver las escaleras que daban acceso a la primera planta de la vivienda, en la que se originó el fuego.

Inhalación de humo

Uno de los agentes logró entrar en la vivienda pese a las dificultades que planteaba el escenario y sacó con vida a una mujer, familiar del fallecido. Tras el rescate, ambos fueron atendidos por personal sanitario y el agente fue trasladado al hospital por haber respirado demasiado humo.

El fallecido, de unos 58 años, sufría problemas de movilidad tras un accidente acontecido en el pasado. Se trataba de una persona bastante conocida en el pueblo. Las autoridades encontraron el cuerpo calcinado en el interior de la estancia afectada. Se presume que murió asfixiado. La autopsia se encargará de dictaminar el motivo exacto. La Guardia Civil, asimismo, ha abierto una investigación para esclarecer las causas que originaron el fuego, aunque en principio todo apunta que se trata de un incendio fortuito.

Hasta la vivienda se desplazó un equipo de Policía Judicial para recoger indicios. A la llegada de los efectivos de bomberos, provenientes de los parques de Alzira y Xàtiva, las llamas ya estaban apagadas, por lo que procedieron a revisar y ventilar el interior de la vivienda para, de ese modo, asegurarse de que el fuego no se reactivara en ningún momento.