Las fallas de Carcaixent demostraron anoche que son impredecibles y que todo es posible. Todas las quinielas aventuraban el décimo doblete consecutivo de Cánovas del Castillo. Pero no fue así. A las 20:51 horas saltó la sorpresa cuando se anunció a Cánovas como segunda mejor falla infantil, lo que dejaba a Plaça Major como primera. El griterío de éstos últimos superó con creces a la comisión que había sido mencionada. Eso sí, en monumentos grandes se cumplieron los pronósticos y la comisión dedicada al histórico político se hizo con el primer premio y mantiene, de esa forma, su hegemonía en las fallas carcagentinas. Segunda fue Plaça Major mientras que la tercera plaza fue para Creu Julià Ribera. Por su parte, Jardí de l'Alegria completó el podio de los monumentos infantiles.

El jurado visitó los monumentos a lo largo de la mañana. Durante su recorrido se encontró con composiciones de lo más variadas y con temáticas que abordaban diferentes aspectos de la actualidad. Creu Julià Ribera dispuso una creada por Juane Cortell con tintes venecianos. El carnaval y las máscaras centraban la atención visual de un monumento que en su crítica tenía versos para el gobierno local y para la oposición. La política es un teatro. Además, incluía una pequeña balsa que emula la Fontana di Trevi, en la que se pueden arrojar monedas para colaborar con la asociación Tots Sumem.

Cánovas optó por la introspección. Una espectacular composición con un elefante como elemento central que se centró en criticar a las propias fallas. Desde los presidentes, hasta las cuotas, pasando por aspectos de lo más cotidianos para todos aquellos que están apuntados a una comisión.

Plaça Major, por su parte, llevó a su monumento uno de los temas más preocupantes del momento: la crisis citrícola. En una localidad que se enorgullece de ser cuna de la naranja, no podía faltar dicha temática. En ella se observan algunos de los momentos de esplendor, como la época modernista, aunque llama especialmente la atención el ataud lleno de naranjas que simboliza la muerte del cultivo más rentable de la comarca.

Reconocimiento a Muntanyeta

Llegadas las 20,00 horas se produjo el momento más esperado de la jornada y prácticamente del año. Agolpados en el Passeig se encontraban representantes de todas las comisiones carcagentinas que ansiaban conocer qué fallas serían reconocidas por sus monumentos. También se dieron a conocer el resto de distinciones. Plaça Major se hizo con los premios a mejor presentación, crítica local y al mejor «llibret». También obtuvo el reconocimiento al «enginy i gràcia». Dicho distintivo en categoría infantil recayó en Cánovas del Castillo. Por su parte, Muntanyeta obtuvo el premio al uso del valenciano.