El proceso de confección de candidaturas para las municipales de mayo ha abierto en Alzira un singular apartado de despedidas de concejales que no repetirán que inició Aida Ginestar (Compromís) a falta de casi tres meses para los comicios y que poco a poco gana adeptos. El socialista Pepe Grau ha aprovechado las redes sociales -como hizo Ginestar- para, con absoluta sinceridad, anunciar que su experiencia como concejal finaliza ya que no se le ha ofrecido un puesto de salida en la lista del PSPV y, en sucesivas publicaciones, se ha despedido de militantes e incluso ha informado su última visita a la sede, coincidiendo con una «mascletà» de las pasadas fiestas. También el concejal del PP Enrique Lahuerta ha comunicado públicamente su «decisión irrevocable» de no repetir en una lista para la que suenan nombres de nuevas incorporaciones, aunque es una incógnita. Los tres han realizado un breve balance de su paso por el ayuntamiento, aunque agotarán el mandato.
La despedida con mayor carga de profundidad política corresponde a Aida Ginestar. Por un lado, por el momento en que realizó su anuncio, la víspera de la asamblea de Compromís que debía refrendar la lista que encabeza el alcalde, Diego Gómez -aunque en ese primer intento no alcanzó el apoyo requerido del 80 %-; por otro, al aprovecharla para lamentar que la lista no se hubiera elaborado mediante unas primarias, un proceso que, según expone, «nos diferencia del resto de partidos y no deberíamos perder». Tras una introducción en la que manifesta que siempre ha sabido «que estaba de paso», comunicaba que había tomado la «dura» decisión «de no aceptar un puesto de salida en la lista de Compromís. Las primarias situaron en 2015 a Ginestar como número dos y algunas fuentes aseguran que la oferta inicial de Gómez la situaba en el quinto puesto, si bien con posterioridad llegó a ofrecerle el cuarto. La concejal de Cultura y Deportes argumenta que se va porque necesita tiempo para preparar una oposición. Ginestar es la única de los actuales ediles de Compromís que no repite.
El malestar de Grau
La despedida de Pepe Grau también denota malestar. No oculta que le hubiera gustado continuar y lanza un mensaje que parece dirigido a la dirección local del PSOE. «Nadie es imprescindible, ni el cargo de representación política es, o debería ser, una profesión. Soy de los que piensa que no se debería estar más de dos legislaturas en un cargo público, ya que alguien pueden pensar que éste lleva su nombre y que es un puesto permanente y vitalicio y eso no puede ser bueno para el pueblo, que es el auténtico propietario», argumenta, mientras destaca el trabajo realizado como concejal de Educación. Cabe señalar que de los cuatro concejales que tiene el PSOE en el ayuntamiento sólo repetirán la candidata, Isabel Aguilar, y Fernando Pascual.
El último en anunciar públicamente que abandona la política ha sido Enrique Lahuerta, aunque no es el único concejal del PP que ha comunicado internamente que no seguirá. El edil popular recuerda que entró en el ayuntamiento de la mano de Elena Bastidas «sin ser político» y que ha conocido tanto las responsabilidades de gobierno, en los años más duros de la crisis y en el área de Hacienda, como el trabajo que se realiza desde la oposición. Dejará el ayuntamiento tras una etapa de ocho años para dejar paso «a nuevos compañeros que tengan más juventud, ganas y sapiencia que yo». El nuevo líder del PP, José Andrés Hernández, deberá presentar una candidatura renovada ya que, por un lado, son ya varios los concejales que le han comunicado que no seguirán y, por otro, necesita incorporar mujeres ya que el grupo actual, con la ausencia de Chelo Martínez, está compuesto íntegramente por hombres. Los puestos de salida para los actuales ediles se presumen muy caros.
