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Medio Ambiente

Los campos abandonados son la gran amenaza para los parajes naturales de Alzira

El plan de prevención de incendios Murta-Casella aboga por convertir las parcelas llenas de maleza en espacios limpios que frenen la propagación

Un campo abandonado y repleto de maleza en el corazón del valle de la Casella. vicent m. pastor

El Plan de Prevención de Incendios Forestales del Paraje Murta-Casella aprobado por el Ayuntamiento de Alzira señala como zonas de riesgo potencial tanto las áreas urbanizadas y núcleos habitados en el entorno del Paraje Natural Municipal como los campos abandonados que, especialmente en el valle de la Casella, acumulan una gran cantidad de combustible vegetal seco. El documento establece que se deberán realizar tratamientos perimetrales sobre la vegetación en las áreas urbanizadas y, por lo que respecta a los cultivos repletos de maleza, contempla articular convenios o arbitrar ayudas durante los diez años de vigencia del plan para el mantenimiento de las parcelas abandonadas de forma que pasen de ser propagadoras del fuego a «ralentizadoras de la propagación». Con este fin, plantea dejar estos campos desprovistos de vegetación o con arbolado disperso, sin matorral y roturados. Una de los aspectos más llamativos de este primer plan de prevención de incendios específico del paraje Murta-Casella es que abre la puerta a la instalación de cañones de agua para proteger los valles, si bien condiciona la misma a un posterior estudio de impacto.

Las propuestas que contempla el documento para reducir el riesgo de incendio en la Murta y la Casella pasan por una mejora de la red hídrica que permita disponer de agua con la presión suficiente para que los medios de extinción puedan actuar desde dentro, una actuación sobre las pistas forestales para garantizar que sean transitables, habilitando franjas de seguridad a través de trabajos de selvicultura preventiva; reforzar la vigilancia a través del voluntariado y con el apoyo de las cámaras que ya operan o articular una coordinación con los pueblos del entorno ya que los incendios más graves no se suelen iniciar dentro del paraje.

El plan de prevención, no obstante, sugiere otras actuaciones fuera del Paraje Natural Municipal que pueden contribuir «ampliamente» a la protección y conservación del mismo. Contempla por un lado la realización de una faja auxiliar en el camino de acceso al Racó de les Vinyes, la zona habitada más próxima a la Murta en el término de Alzira, y en torno a la pista que une este núcleo con el Xavegó como forma de «minimizar» el riesgo de propagación de un hipotético incendio. También identifica otras áreas con edificaciones -el extremo meridional del Respirall, casas del Pla de la Murta y en la Casella e incluso explotaciones particulares en la Solana del valle d'Aigües Vives- en las que recomienda realizar tratamientos perimetrales.

El concejal de Medio Ambiente, Pep Carreres, comentó que un técnico forestal ya está trabajando con las urbanizaciones que deberán establecer un perímetro de seguridad -la ley obliga a los propietarios- y, en concreto, fuentes municipales explicaron que se está realizando una auditoría para analizar las medidas de autoprotección -fajas de seguridad, puntos de agua, señalización de vías de evacuación- de que disponen actualmente y establecer las prioridades de actuación. El ayuntamiento ha mostrado su disposición a colaborar con los vecinos para dotar a estas áreas residenciales de mayor seguridad.

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