La Asociación de Vecinos de Vilella ha mostrado su sorpresa por la «urgencia» con la que el gobierno municipal pretende aprobar el proyecto de la segunda fase del canal de Les Basses -pasa esta tarde por el pleno- y ha reclamado que se priorice la ampliación del barranco de la Casella ya que, de lo contrario, se conducirá toda el agua de escorrentía a un cauce que, como se ha comprobado, resulta insuficiente y en el que las crecidas obligan a cerrar las compuertas de desagüe de una parte del casco urbano.
Fuentes de la directiva de la AA VV comentaron que en el debate electoral sobre inundaciones, en la que participó el ingeniero Xavier Machí, «observamos notables discrepancias entre lo que decía Machí y las soluciones que se aportaban», por lo que creyeron que el ayuntamiento buscaría un consenso. Sin embargo, el tripartito aprovechará hoy el último pleno del mandato para aprobar el proyecto de la segunda fase del canal, una obra con un coste estimado de un millón de euros más las expropiaciones, que pueden representar un desembolso adicional de 700.000 €. Representantes de la asociación asistirán al pleno para interesarse por la «urgencia» y expresar su preocupación.
«No entramos a valorar el proyecto del canal porque no nos corresponde, no cuestionamos su utilidad, pero no entendemos que se empiece la casa por el tejado. Primero se tiene que adecuar el barranco de la Casella y, después, ya llevaremos el agua allí», incidieron desde la asociación.
Los vecinos reclaman que se priorice tanto la ampliación del barranco de la Casella como el desvío de la desembocadura del barranco de Barxeta para facilitar la salida de las escorrentías en caso de fuertes lluvias y evitar inundaciones. En este sentido, incidieron en que invertir más de tres millones en un proyecto como el canal de Les Basses -1,5 millones en la primera fase más 1,7 de la segunda- «es mucho dinero para que cuando el agua alcance en el barranco 3,80 metros de altura se tengan que cerrar las compuertas de Les Basses, con lo que persiste el mismo problema, cuando está probado que desde que se hizo la ampliación del barranco de la Casella a la altura del centro comercial éste nunca se ha salido».
Consenso entre Administraciones
Este colectivo vecinal reclama un consenso entre las tres Administraciones, estatal, autonómica y local, para priorizar las actuaciones que mejoren la seguridad de Alzira frente a inundaciones, fijar un calendario y el sistema de financiación.
La asociación de Vilella señala que las dudas que expresó Machí «cuadran» con las consultas que ha realizado. «No es que el canal esté mal hecho, es que si no se amplía el barranco de la Casella no va a poder desaguar», subrayaron. Esta segunda fase diseña un canal de más de 800 metros que interceptará todos los barrancos de la cuenca este antes de su confluencia con el Camí de Pescadors -Barranc Fosc, El Respirall, Gracia María y el Camí de l’Arena- para dirigir las aguas hacia la primera fase, que desemboca en el barranco de la Casella.
